Bajar el Cielo a la Tierra

Como el AMARANTO. La nueva doctrina del shock. La nueva guerra. Bioterrorismo, "lavado" de cerebros con el miedo, propaganda global de la plandemia con la deso...rientación, confusión, para que la auto censura opere en automático, no se sepa qué ley (norma) debemos cumplir (todos contra todos); miseria, hambre, acrecentar las enfermedades y muertes (todos son covid bajo test que dan cualquier fruta); (los estados cobran bonos por muertos y por número, ver informe del banco mundial y OMS, año 2016, 17 y 18); la plasmación del control digital policial; convertir a las masas en policías; el uso de la inteligencia artificial; ante el caos que promueven se presentan las soluciones más distópicas bajo un PODER de entes transcionales, supranacionales. Si normalizaron el uso de transgénicos, si hablan de soberanía alimentaria cuando se refieren a venenos; cuando hablan de comida artificial, carne sintética, o de que produzcamos de las formas más divergentes chanchos o lo que sea, si hay una masa que no VE cuál fue, es y será, lo que adultera la naturaleza, ¿cómo no van a poder hablar de vacunas con ARN?, ¿cómo no va a percibir esa masa zombie, temerosa, que no se distancia, aísla, de la versión oficial de los medios e instituciones, autoridad externa (sea gobernante o un maestro, gurú) como una oportunidad el que prueben las vacunas más cuando nos dicen que trae ARN? (Lo cual es información que adultera nuestro ADN). No pueden VER porque la guerra es psicológica. Las bases distópicas, deshumanizadas, desnaturalizadas, egocéntricas, materialistas, desconectadas de su esencia o bajo el influjo de una espiritualidad egocéntrica... ¿cómo van a ser capaces de ver si están dentro del estado de shock o indiferentes al dolor engendrado por los efectos de un conocimiento distorsionado? Son nuevas armas... De la desolación al triunfo de la bestia, las masas tendrán su sello. Si esta info te da miedo, estás tardando en elevar tu vibración (vivir en consciencia de UNIDAD)... para ser capaz de VER, sin huir ni perderse en la densidad. "Consciencia: la capacidad de conocerse a uno mismo (recordar quiénes somos) y conocer la realidad que nos rodea para interactuar con ella." Temor ninguno y/o toda vez que los haya, confrontar con ellos para no adaptarnos al inframundo, toca renacer, aunque en ello nos vaya esta vida. Sólo conocerás el sentido de tu vida cuando comprendas el sentido de la vida... estamos en un gran fin de ciclo. O te transgenizas o floreces, resistes como la naturaleza, como el amaranto. Vinimos a dar testimonio, a transcender nuestros egos, creyendo que la evolución vendrá de la evolución tecnológica!!! La tecnología sin humanidad es distopía en estado puro. Esa labor nadie lo puede hacer por nosotros. Sólo hay dos vías. La distópica y la que nos acerca a utopía. Ningún acto de valor pasa desapercibido... nada que hagamos en consciencia se pierde... la consciencia de la humanidad es UNA... ellos y todo lo que pasa nos espeja, la experiencia nos permite salir del autoengaño o, al menos, comenzar a dimensionarlo. Confianza, compasión, mucha compasión, no dan más de sí, y mucha inteligencia y voluntad para discernir la acción que nos transciende como humanidad UNA. Toca recuperar nuestra naturaleza interna. Hay que aprender a respetar a quien no puede ver, a quien no quiere ver... por más que se conviertan en los "enemigos" más cercanos y peligrosos. Vinimos a dar testimonio, no a agradar, ni decir medias verdades, ni querer convencer. La práctica de la veracidad es algo interno, es el más grande salón de los espejos. Tiempos de sembrar el desapego, tiempos de salirse de la comodidad, tiempos de profunda introspección para ver la distancia entre la idea que tengo de quiénes somos y quiénes en verdad estamos siendo. Sólo lo que veo puedo integrarlo, observarlo de qué ideas está hecho que me hacen reaccionar en automático u obrando desde la imitación. Lo que la mente superior ve y siente, comprende en profundidad, puede ser disuelto para abandonar las viejas formas de estar. Eso no se puede hacer desde el personaje. El presente es el pasado en profundidad, y lo que hagamos en cada acto presente forja el futuro. ¿A qué le tenemos miedo?, ¿de qué huyo o a qué me apego? La re evolución es mental y cada acto de transcendencia, por más pequeño que parezca, informa, incide, está disponible para toda la humanidad. Somos fractales, no fragmentos. Somos una parte que conforma una suma de partes mayor y en simultáneo contiene la totalidad. ¿A qué le tengo miedo? ¿Cuál es el olvido más grande? ¿Qué nos humaniza y deshumaniza? Hay tarea... vaya si la hay. Los sembradores no están pendientes de la cosecha, no buscan un interés personal ni colectivo... no van detrás de ningún interés, van movidos por la verdad, que es bondad, sabiduría y voluntad para renacer (teniendo que pasar el proceso de morir a una forma de estar), en pos de una compasión que todo lo abarca... cuando hay interés hay apego a un resultado... y el resultado es algo que se cosechará al final de un largo proceso. Es el cómo, no el qué lo que cuenta. Ver la diferencia entre egoísmo y egocentrismo. Somos naturaleza... y hasta que no la honremos en nuestra vida cotidiana, con todos nuestros actos e ideas, nos veremos en el autoengaño. Demos las gracias... estamos ante lo que esperábamos... la más grande prueba. Nadie nos juzga, sólo cada uno puede verse y saber con qué está liando para desenrollarse, quitar las capas (descubrir) que pusimos sobre el SER que somos.

Mientras... ¿qué hacer? Mientras siguen decidiendo arriba sin consultar (los que nos representan): Que probarán vacuna con nosotros... Que el compromiso primero... es cumplir con la agenda 2030 (nuevo orden mundial)... Que en nombre de cuidarnos se normaliza el control digital policial... Que todo lo que nos sana, tomar el sol, respirar aire puro, comer comida saludable, no adulterada, se normalizó que está prohibido, es peligroso o es un lujo... Mientras aplican el fracking social con una disidencia controlada a full... Mientras la doctrina del shock es la más grande y a la vista, que hace todo esto enumerado porque unas elites, desde entes supranacionales dicen "nos cuidan"... Mientras algunos enojados cuando muestras evidencias te dicen: pero no ves que están los malos al acecho!!! (en el supuesto otro bando)... Tomo consciencia de: Que unos pocos en todo el mundo estamos viviendo en presencia la enjundia del plan. Que la re evolución es de nuestra mente, viviendo en coherencia con lo que somos, humanos... Que no podemos esperar que el nuevo mundo que habita en nuestro corazón venga de algún salvador de arriba (élites, gobiernos, extraterrestres, ángeles, hermandad espiritual)... Que hay que sembrar por fuera una inercia, (porque el sistema que somos nosotros todo lo engulle), en nuestra vida cotidiana, con compasión, cambiando nuestros hábitos, viendo qué necesitamos, reviendo no confundir valor y precio, qué nos humaniza, recuperando nuestro poder, dejando de delegarlo a alguna autoridad externa... Asumiendo que mientras el viejo mundo tarda en morir, el nuevo requiere sembradores, no cosechadores... Ver cuán responsables somos, que no se puede cambiar el afuera si no nos transformamos nosotros... Ver, ser conscientes de los retos que vendrán, más olas distópicas ante las que cada uno se situará, nadie le obligará, cada uno verá que niega, qué puede entrever y hacerse el sota o qué está dispuesto a ver... Aceptar que el rey está desnudo de humanidad... y habrá una mayoría que necesitará vestirlo (se rasgarán como nunca las vestiduras)... Cuando tomo consciencia, surge la confianza, inteligencia, sensibilidad y voluntad para ser los jardineros... No adaptarse, dedicar muchas horas a la introspección, la reflexión profunda en este gran salón de los espejos, para desintoxicarnos, ante esta guerra psicológica, entrenarse en vibrar alto y poder confrontar... Cuando ves, no tienes que elegir. Tiene que elegir quien no ve, quien aún tiene la mente con turbulencias que le hacen dudar... que aún le operan los instintos de sobrevivencia o está no pudiendo tocar las programaciones a las que hemos sido sometidos por eones... (todos estamos viéndonos en qué vivencias tenemos que elegir, aún). Eso es hacerse responsable. Compasión... la fragmentación hay que ser capaz de transcenderla recordando la fractalidad... Somos una sola consciencia... nada de lo que pasa me es ajeno (eso sería ahondar en el egocentrismo)... El dolor de la humanidad es el mismo en todo el planeta; la compasión, solidaridad, debe de plasmarse, también, con todas las formas de vida... cada uno está respondiendo según su estado evolutivo... Que ese VER la diversidad no nos separe ni haga creer que somos mejores... ahí estaremos siendo presa del ego espiritual, el más tramposo si los hay... (y al que más apela el sistema)... Que reconozcamos la impaciencia... que recordemos que todo está en su sitio y que es nuestro ego el que no entiende los grandes ciclos y procesos... La urgencia, el a-puro es enemigo de la pureza... Vivir en coherencia con nuestra naturaleza es la más grande oportunidad y estamos "ensayando", quitando infinidad de capas de olvido que hemos puesto encima de nuestra esencia... El temor a la muerte es el olvido de la esencia, cuando la enlazamos somos ingobernables, sólo gobiernan en lo denso... La incertidumbre la tienen los que apelan a nuestro olvido!!! No pueden contra los ciclos... Sembrar, por más pequeño que resulte cada acto, sembrar... No somos gotas de un océano, somos el océano en gotas... que nos adaptamos, sí, a lo que en consciencia toca: despertar, trascender el materialismo, el egoísmo, egocentrismo, apegos a las repulsiones y atracciones... y recuperar lo verdaderamente transcendente. Es un camino que parece en solitario, pero si miramos con los ojos del corazón, nos vemos en todos y en cada uno... estamos abriendo la caja de pandora que nos hacía creer éramos los buenos!!! La fractalidad nos coloca, confronta con la ilusión de separación de la consciencia una que somos como HUMANIDAD. Demos gracias por permitir que nos sea mostrado lo que no somos, sintamos hasta el fondo cada sombra y desde allí, toca renacer, viendo, observando, y toda vez que nos sea posible, ser honestos con lo que nuestro corazón demanda y, si otra vez nos "gana' el personaje, dar gracias de que lo vemos... Toca ver la diferencia entre albergar conceptos y serlos. Y eso es para almas valientes, que no se quejan del estado del mundo, se hacen responsables de la fractalidad. Toda vez que necesito huir de algo porque me roba energía, me da miedo, más debo observar eso... ahí están las perlas!!! En lo que el ego percibe como afín (lo que le agrada) no evolucionamos!!! Toca "bailar con la más fea"!!! (nuestras sombras). No dependemos de lo que pase afuera (ahí fuimos programados), lo que hagamos con ello sólo depende de nuestro interior, del nivel de comprensión, de lo dañados o armoniosos que estemos. Si sientes miedo al confrontar con esta distopía, no te tardes!!! Es la puerta que se abre para que cada uno se examine en consciencia. Sólo se trata de habilitar nuevos ojos... el mundo material y de las apariencias se ve con los ojos físicos, el mundo que nos devuelve la humanidad se ve con los ojos contemplativos... esos son los que ven las cosas como son, los que sirven para salirse de toda reacción en automático... y nos muestran qué ideas albergamos que hacen que las cosas las perciba en modo rechazo o atracción. Me muestran mi trampa, mis apegos, mi urgencia, mi separación (sin que esto suponga justificar la codicia y perversión de un sistema que está muerto, que no da más de sí). Silencio no es callarse la boca, el silencio es aprender a acallar nuestra mente concreta... El silencio es el que nos abre la puerta a lo que no queríamos ver ni aceptar, es el que descubre con qué hemos cubierto el ser que somos. Humanizar la tierra... es un darle el sentido profundo a todo este sinsentido. Gracias por impulsar consciencias (distopía). En la comodidad la humanidad, colectivamente o a nivel individual, no evoluciona... darse cuenta y dar las gracias. Con cada acto de bondad y de maldad, en cada acto presente, forjamos nuestro futuro. El futuro es hoy... no será algo distinto a lo que hagamos hoy. Manos y corazones a la tarea. Sin prisa, pero sin pausa, no nos tardemos. Nadie lo puede hacer por nosotros.