encontrarser.com.ar
Moreno

Codependencia emocional: En una relación codependiente uno de los miembros de la pareja vive por y para el otro, envolviéndose en un rol protector-salvador de todas las problemáticas. Con ciclos de ayuda, reproches y reconciliaciones.

Haciendo psicodrama...la expresión dramática, el juego teatral, el movimiento del cuerpo, la expresión de lo simbólico y la puesta en escena de lo vivido como herramientas terapéuticas. En el Psicodrama interviene el cuerpo en acción e interacción con otros.

Codependencia emocional: En una relación codependiente uno de los miembros de la pareja vive por y para el otro, envolviéndose en un rol protector-salvador de todas las problemáticas. Con ciclos de ayuda, reproches y reconciliaciones.

Haciendo psicodrama...la expresión dramática, el juego teatral, el movimiento del cuerpo, la expresión de lo simbólico y la puesta en escena de lo vivido como herramientas terapéuticas. En el Psicodrama interviene el cuerpo en acción e interacción con otros.

Haciendo psicodrama...la expresión dramática, el juego teatral, el movimiento del cuerpo, la expresión de lo simbólico y la puesta en escena de lo vivido como herramientas terapéuticas. En el Psicodrama interviene el cuerpo en acción e interacción con otros.

Cerrar ciclos No cierres el año sin soltar, sin dejar ir, sin liberar y sin perdonar. Lo que no sueltas lo arrastras. Cargas con ello. Da igual donde vayas, va contigo.... Aquello que no se ha sanado, no se ha corregido, viaja con nosotros. Los rencores, los resentimientos están cargados de sentimientos y de emociones, se impregnan en las células y hasta en el ADN. Son dolores del alma, heridas abiertas. Cerrar ciclos es cambiar y sanar la percepción. Es comprender y entender lo que ocurrió. Es darnos la oportunidad de ver de otra manera. Nada puede cambiar, mientras no se entienda. El entendimiento es luz y donde hay luz hay claridad, claridad mental. Cuando comprendemos los por qué y los para qué, nos damos cuenta que solo tenemos que perdonarnos a nosotros mismos. No hay más perdón que éste. No soltar y querer tener razón nos mantiene de lleno en el conflicto. Los personajes y el cuadro parece cambiar, pero el conflicto es el mismo. Nuestra vida no fluye, enfermamos, tenemos conflictos con nuestros hijos y problemas de dinero. Todo ello no es más que un viejo conflicto sin resolver en nuestra mente. Es la oportunidad de elegir de nuevo, de tomar conciencia. Nosotros somos el problema y nosotros somos la solución. Revisar el pasado con otros ojos, sin juicios nos libera. Manuel González Bedmar Acompañante del Perdón

Alta Emiliano y Ángel!!