A G E A C A C Argentina Filial Oberá
Oberá, Misiones

DOMINGO DE RESURRECCIÓN El Evangelio de la Verdad es alegría para aquellos que han recibido del Padre de la Verdad la gracia de conocerlo, por medio del Poder ...de la Palabra (del Verbo, del Cristo) que ha venido desde el Pleroma (desde la Plenitud), la que está en el Pensamiento y en la Inteligencia del Padre, la que es llamada Salvador, ya que es el nombre de la Obra que debe llevar a cabo para la Redención (Salvación) de aquellos que eran ignorantes del Padre, mientras que el nombre [de] "Evangelio" (Buena Nueva) es la proclamación de la esperanza, siendo descubierta por aquellos que Le buscan. (Textos de Nag - Hammadi) Pero María estaba fuera llorando junto al sepulcro; y mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro; y vio a dos ángeles con vestiduras blancas, que estaban sentados el uno a la cabecera, y el otro a los pies, donde el cuerpo de Jesús había sido puesto. Y le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde le han puesto. Cuando había dicho esto, se volvió, y vio a Jesús que estaba allí; mas no sabía que era Jesús. Jesús le dijo: Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas? Ella, pensando que era el hortelano, le dijo: Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo has puesto, y yo lo llevaré. Jesús le dijo: ¡María! Volviéndose ella, le dijo: ¡Rabboni! (que quiere decir, Maestro). Jesús le dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios. Fue entonces María Magdalena para dar a los discípulos las nuevas de que había visto al Señor, y que él le había dicho estas cosas. (Juan Biblia Canónica) ¿A Quién buscamos quienes seguimos un Camino Espiritual? Pareciera que nos preguntara el Salvador en esa pregunta a María Magdalena, su esposa ¿Será al Cristo Histórico, al Cristo Cósmico o al Cristo Íntimo? ¿De que valdría, -concluimos meditando en esto-, extasiarnos con las Enseñanzas del Adorable o reconocer esa Fuerza Divina en el Cosmos, si antes no lo hemos buscado, seguido y finalmente unido en lo íntimo de nosotros mismos? Uno de los aspectos más elevados del Cristianismo es el Misterio de la Resurrección El VM Samael Aun Weor nos ayuda a comprender un poco mas al respecto en estas enseñanzas: "Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre, la resurrección de los muertos". "Porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados" (Vers. 12 a 22, Cap. 15; 1 Corintios). Así pues, la Doctrina de Cristo es la Doctrina de la Resurrección de los muertos. Ahora bien, nosotros los gnósticos enseñamos que la resurrección de los muertos, sólo es posible por la INICIACIÓN. La resurrección de los muertos, es del alma y no del cuerpo físico. "Esto empero, digo, hermanos, que la carne y la sangre no pueden heredar el Reino de Dios; ni la corrupción hereda la incorrupción" (Vers. 50, Cap. 15; 1 de Corintios). "Así también es la Resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, se levantará en incorrupción". "Se siembra en vergüenza, se levantará con gloria, se siembra en flaqueza, se levantará con potencia". "Así también está escrito: fue hecho el primer hombre Adam en ánima viviente; el postrer Adam en espíritu vivificante". "Más lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual". "El primer hombre es de la tierra, terreno: el segundo hombre, que es el Señor, es del Cielo" (Vers. 42 a 47, Cáp. 15, 1 de Corintios). Con estos versículos queda completamente comprobado que la Resurrección es del Alma y no del cuerpo. Sería completamente ridículo, y totalmente risible, pensar que los huesos se juntarán con los huesos, para resucitar al final de la gran trompeta, tal como piensan los protestantes, católicos, adventistas, presbiterianos, etc. Se necesitaría que uno estuviera "loco" para aceptar semejante adefesio. La resurrección de los muertos solo se consigue por medio de la sabiduría oculta. "Más hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria" (Vers. 7, Cap. 2; 1 Corintios). Un hijo de Resurrección tiene los siguientes poderes: 1. Tiene poder para ver y oír en todos los mundos internos. 2. Tiene poder para manejar los Misterios de la Vida y la Muerte. 3. Se le da poder para juzgar a los muertos vivientes (la humanidad entera). 4. Nace a voluntad y desencarna a voluntad. 5. Tiene poder para apaciguar las tempestades o desatarlas, a voluntad. 6. Poderes para hacer temblar la tierra, y hundir continentes a voluntad. 7. Poderes sobre el fuego y los huracanes, etc.

SÁBADO SANTO Las únicas referencias de la Biblia canónica a lo que sucedió el sábado entre la muerte y resurrección de Jeshuá se encuentra en la Primera epístola de Pedro (3,19; 4,6), en Mateo (27:62-66) y Juan (2:19-21). Después de la puesta del sol del sábado, al final del día de reposo - los sumos sacerdotes y fariseos fueron a Poncio Pilato y le pidieron que un guardia se colocara en la tumba de Jesús para evitar que sus discípulos sacaran y llevaran el cuerpo. Se acordab...Continue reading

DOMINGO DE RESURRECCIÓN El Evangelio de la Verdad es alegría para aquellos que han recibido del Padre de la Verdad la gracia de conocerlo, por medio del Poder de la Palabra (del Verbo, del Cristo) que ha venido desde el Pleroma (desde la Plenitud), la que está en el Pensamiento y en la Inteligencia del Padre, la que es llamada Salvador, ya que es el nombre de la Obra que debe llevar a cabo para la Redención (Salvación) de aquellos que eran ignorantes del Padre, mientras ...Continue reading

DOMINGO DE RESURRECCIÓN El Evangelio de la Verdad es alegría para aquellos que han recibido del Padre de la Verdad la gracia de conocerlo, por medio del Poder de la Palabra (del Verbo, del Cristo) que ha venido desde el Pleroma (desde la Plenitud), la que está en el Pensamiento y en la Inteligencia del Padre, la que es llamada Salvador, ya que es el nombre de la Obra que debe llevar a cabo para la Redención (Salvación) de aquellos que eran ignorantes del Padre, mientras ...Continue reading

SÁBADO SANTO Las únicas referencias de la Biblia canónica a lo que sucedió el sábado entre la muerte y resurrección de Jeshuá se encuentra en la Primera epístola de Pedro (3,19; 4,6), en Mateo (27:62-66) y Juan (2:19-21). Después de la puesta del sol del sábado, al final del día de reposo - los sumos sacerdotes y fariseos fueron a Poncio Pilato y le pidieron que un guardia se colocara en la tumba de Jesús para evitar que sus discípulos sacaran y llevaran el cuerpo. Se acordab...Continue reading

VIERNES SANTO "Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado. Y tomaron a Jesús, y le llevaron. Y llevando su cruz, salió al lugar que se dice ...de la Calavera, y en hebreo, Gólgotha, donde le crucificaron y con él otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio. Y escribió también Pilatos un título, que puso encima de la cruz. Y el escrito era: JESUS NAZARENO, REY DE LOS JUDÍOS. Y muchos de los Judíos leyeron este título: porque el lugar donde estaba crucificado Jesús era cerca de la ciudad y estaba escrito en hebreo, en griego y en latín. Y decían a Pilatos los pontífices de los Judíos: No escribas, Rey de los Judíos sino que él dijo: Rey soy de los Judíos. Respondió Pilatos: Lo que he escrito, he escrito." LAS SIETE PALABRAS COMO CÁTEDRA PARA LA CONCIENCIA Cuando el Maestro hizo todo el recorrido con su Cruz a cuestas, recibió todos los atropellos contra su dignidad humana y contra su mensaje. Lo hicieron las multitudes por orden de Caifás. Caifás era el Sumo Sacerdote, símbolo de la mala voluntad, que Pilatos no quiso contener y, éste, para justificar la muerte del Maestro, preguntó a las multitudes qué preferían si la crucifixión y muerte de Jesús o la crucifixión y muerte de Barrabás. Y las multitudes gritaban, refiriéndose a Jesús: ¡Crucifixia!, ¡Crucifixia!. Barrabás, en este drama, representa al Ego, claro, las multitudes siempre apoyan la existencia del Ego y la muerte del Cristo. Como ya dijimos, terminado ese viaje del Maestro con la Cruz, y habiendo recibido toda clase de vituperios y malos tratos, sin haber pronunciado una palabra de protesta, este Hombre ganó el derecho de morir en la Cruz. La bajó de sus hombros y en ella fue clavado con tres clavos de hierro, símbolo del Alma del Mercurio Sagrado. Fue levantada la Cruz con ese sagrado cuerpo, al lado derecho fue colgado un hombre que se llamó el Buen Ladrón pero, ¿Qué explicación nos han dado de ese enigmático personaje?. Me quiero referir a Dimas, ¿Por qué se le llamó Buen Ladrón? Pues ese hombre es nada menos que un discípulo del Maestro; es el Buen Ladrón porque fue capaz, con la enseñanza y la doctrina que el Maestro le enseñó, robarle el fuego al Diablo, arrancarle a la Naturaleza los misterios que ella tiene ocultos y que no se los entrega a los fornicarios. Ese hombre, Dimas, también para que se cumpliera la palabra, dio testimonio público de que ése era el Cristo, porque él había practicado su doctrina y había logrado también su regeneración y, por este hecho, fue condenado a morir en la Cruz con su Maestro. Gestas, el Mal Ladrón, este hombre ya era un condenado cuando a Jesús se le sentenció y, también para que se cumpliera lo que estaba escrito, lo crucificaron a la izquierda del Maestro. Este hombre, Gestas, es el fornicario, el ladrón, podríamos decir, en términos generales, el hombre pecador. Ya decíamos que el Buen Ladrón le robó el fuego al Diablo y el Mal Ladrón le quitó a su Dios Interno, al Cristo Intimo todos los derechos que sobre su humana persona tenía. Estando todos subidos en la Cruz, aparecieron las Santas Mujeres que habían asistido a todo el drama de la Pasión y Muerte del Maestro; conocían el poder que él ejercía y, por lo tanto, testimoniaban que: ¡Ese era el Superhombre! Tenían que ser mujeres las que hacían esto. Entre esas mujeres estaba María, me refiero a la Santísima Virgen, Madre del Cristo, (nos referimos también a la diferencia que hay entre el Cristo y Jesús); esa mujer que, en su vientre, gestó el Cristo Cósmico, esa Alma Gemela que, como dijera un versículo de un libro sagrado: DONDE ISIS LLORA Y VELA A SU HERMANO BIENAMADO; esa mujer que fue capaz de esculpir al Cristo en ese hombre Jeshuá; esa Virgen casta y pura que supo cumplir a cabalidad con esos tres papeles que cumple una mujer santa: - Fue la hija obediente a Dios. - Fue la esposa de un auténtico hombre. - Fue la Madre del Cristo. Esa mujer que los cristianos la adoramos pero, ¿Por qué la adoramos?, ¿Porque gestó en su vientre a un niño de carne y hueso?, no querido lector, porque en su vientre se gestó el Cristo y si ella fue la Madre del Cristo, por lógico, para nosotros los cristianos, representa nuestra Madre pero, no olvide, querido lector, que todo auténtico hombre que trabaje con esa Isis, tarde o temprano, ella se convertirá en una Madre del Cristo. Este drama que para la mayor parte de la humanidad se presentó hace dos mil años, como si sólo hubiera quedado como una historia, pues para nosotros, los conocedores del Sendero Iniciático, sabemos que este acontecimiento vibra y palpita día y noche en el corazón y en la vida de la persona que toma la decisión de seguir por el camino que este sabio Maestro nos enseñara. Como ya dijimos, El fue crucificado en medio de dos personas, las cuales determinan las condiciones en que se desenvuelve la humanidad: unos buenos y otros malos; pero El no quiso estar ni con los buenos, ni con los malos. El Cristo siempre está en el centro. Gestas le decía: SI EN VERDAD ERES EL HIJO DEL HOMBRE, SI ERES DIOS, SI ERES REY, ¿POR QUE NO TE LIBERAS Y NOS LIBERAS A NOSOTROS?. El Cristo guardaba silencio porque él no estaba allí para demostrar poderes ni violar la Ley; estaba escribiendo un Drama con su vida. Dimas, el Buen Ladrón, le dijo: MAESTRO, CUANDO ESTÉS EN TU REINO, ACUÉRDATE DE MI, y el Cristo le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO. Querido lector, esté Ud., plenamente seguro que si Gestas, en ese crucial momento, en lugar de emplazar al Cristo y vituperarlo, le hubiera pedido perdón y ayuda, él se la hubiera dado igual que a Dimas, porque el Cristo es Amor. Viéndose ya en el Drama en medio de los que le ultrajaban y le maltrataban y haciendo un gran súper-esfuerzo, dijo: PADRE MIO, PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN. Esta sentencia nos cobija a todos porque, como ya dijimos, la ignorancia es atrevida. PARA EL PECADOR TODAS LAS PUERTAS ESTÁN CERRADAS MENOS UNA: LA DEL ARREPENTIMIENTO. El que se arrepienta de lo malo que ha sido en esta vida y en vidas pasadas y busque su propia regeneración, indiscutiblemente, el Padre le perdona. Dándole respuesta a Dimas le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO, ya que para el Cristo no hay un ayer ni un mañana, sólo existe un eterno ahora. En medio de esa tortura y dolor él le dijo al que le pidió ayuda: HOY ESTARÁS CONMIGO. El que sólo sabe sentir a Dios cuando tiene dinero, cuando tiene salud, cuando todo el mundo le aplaude, no ha aprendido a refugiarse en los malos momentos en su Dios Interno. Jesús estaba con su Padre y de lo que su Padre le daba, él ofrecía a su discípulo: el Paraíso. Viendo que al pie de la Cruz se encontraba María (Alma Gemela de Jesús, y Madre del Cristo), y al lado de ella estaba Juan, el discípulo amado, el Evangelista, El le dijo a María: MADRE HE AHÍ A TU HIJO, HIJO HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué frases tan alentadoras para esta humanidad!, cuando el Cristo, dirigiéndose a Juan le dijo: HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué sería de nosotros si no tuviéramos una Madre individual, propia, que cuidara de ese Juan, el Verbo y qué sería de un cristiano que se olvidara de su Madre y quisiera buscar ayuda, apoyo, orientación en otra persona!. Esa Madre del Cristo, María, Isis, Rea, Isoberta, Lakhsmi; esa deidad en cuyo vientre se ha gestado y se gestará el Cristo cada vez que un hombre se levante del lodo de la tierra. Reflexionando el Cristo sobre esta humanidad y sabiendo que en el corazón de cada uno de nosotros vibra y palpita una chispa, una partícula de él atrapada por el Yo, por el Ego y, como ya dijimos, esa partícula que existe en nosotros es una chispa emanada del Cristo, viendo él esa miseria humana, esa pobreza espiritual de nosotros, los humanos, exclamó: "PADRE, ¿PORQUÉ ME HAS ABANDONADO?". Pero entienda, querido lector, él era el Superhombre, el Cristo, él no se estaba quejando de su dolor, pedía piedad al Padre Cósmico por ese Cristo Intimo de nosotros mortales que allá, en el fondo, somos uno mismo con Él. ÉL, en la Cruz, estaba lleno de gloria porque era un victorioso, un triunfante, pero él veía que la humanidad estaba perdida y viendo esa situación en nosotros, criaturas mortales, exclamó: TENGO SED. Y allí se manifestaron las dos características de la humanidad, quizás los amigos de él hubieran querido darle agua, pero fueron más listos los enemigos y le dieron hiel. Pero la lógica nos enseña que él no pedía agua para calmar la sed de ese cuerpo, lo hacía en nombre del Cristo Intimo de la humanidad y dijo: TENGO SED. Ese Cristo Intimo de nosotros, los humanos, atado a esa Cruz de la materia está muriendo de sed, pero, ¿Con qué liquido le vamos a quitar la sed?. Querido lector: Con la castidad, con nuestras mismas aguas genéticas, esa fuente inagotable en la que Él, en vida pública, invitara a la mujer samaritana para que, con su esposo, bebieran de esa fuente y nunca más volvieran a tener sed. De aquel maravilloso simbolismo de las Bodas de Canaán, después de agotado el vino, mando que llenaran las tinajas de agua y las convirtió en vino. ¿Por qué tenía que ser en una Boda? ¿Por qué no en otro acontecimiento?. Esas aguas genéticas, transmutadas mediante la ciencia de la alquimia, se convierten en la sangre del Cordero que lava los pecados Estas cátedras que el Cristo iba dejando en estas simbólicas palabras, tienen íntima relación con su Doctrina, con su mensaje y con la humanidad. Viendo que su hora ya había llegado, exclamó, con gran voz: TODO ESTA CONSUMADO. Es decir, su Obra estaba hecha, su mensaje entregado a la humanidad, su doctrina escrita en la Cruz, pero, claro está, con el corazón conmovido por haber venido al mundo y porque el mundo no lo aceptó. Querido lector, así ha sido, es y seguirá siendo la humanidad. Nunca hemos estado preparados para comprender las enseñanzas de los grandes Maestros, de los grandes Mensajeros enviados del Cielo. Cuando el Cristo estuvo en la Tierra, uno de los que levantaron al pueblo contra El, fue Caifás (Sumo Sacerdote), y aseguraron que el Cristo estaba alzando al pueblo contra el César, contra la religión del pueblo, o sea, que los religiosos de esa época lo mataron. Samael Aun Weor, Kalki Avatara, Buddha Maitreya de la Nueva Era de Acuario, cuando escribió EL MATRIMONIO PERFECTO, horrorizó a todos esos caudillos religiosos que nos han querido mantener en las tinieblas, que sólo quieren el sexo para ser fornicarios, para degenerarse, para ser adúlteros, para tener aberraciones; que no ven el sexo como sagrado, como elemento que crea y vuelve a crear, como la parte que regenera o degenera. En los cristianos que nos resolvemos a cumplir los mandamientos de la Ley de Dios, nos regenera; en los fornicarios, homosexuales, lesbianas, masturbadores, los degenera. La Doctrina del Cristo es fálica ciento por ciento, así los fanáticos predicadores religiosos de esta época lo quieran negar; así esta humanidad perversa y degenerada no lo quiera aceptar. Al fin y al cabo, el Cristo es para todos, pero no todos para el Cristo como él nos lo afirmó. Por último exclamó: PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU. Se unió con su Padre y simbólicamente murió. (VM Lakhsmi)

VIERNES SANTO "Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado. Y tomaron a Jesús, y le llevaron. Y llevando su cruz, salió al lugar que se dice ...de la Calavera, y en hebreo, Gólgotha, donde le crucificaron y con él otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio. Y escribió también Pilatos un título, que puso encima de la cruz. Y el escrito era: JESUS NAZARENO, REY DE LOS JUDÍOS. Y muchos de los Judíos leyeron este título: porque el lugar donde estaba crucificado Jesús era cerca de la ciudad y estaba escrito en hebreo, en griego y en latín. Y decían a Pilatos los pontífices de los Judíos: No escribas, Rey de los Judíos sino que él dijo: Rey soy de los Judíos. Respondió Pilatos: Lo que he escrito, he escrito." LAS SIETE PALABRAS COMO CÁTEDRA PARA LA CONCIENCIA Cuando el Maestro hizo todo el recorrido con su Cruz a cuestas, recibió todos los atropellos contra su dignidad humana y contra su mensaje. Lo hicieron las multitudes por orden de Caifás. Caifás era el Sumo Sacerdote, símbolo de la mala voluntad, que Pilatos no quiso contener y, éste, para justificar la muerte del Maestro, preguntó a las multitudes qué preferían si la crucifixión y muerte de Jesús o la crucifixión y muerte de Barrabás. Y las multitudes gritaban, refiriéndose a Jesús: ¡Crucifixia!, ¡Crucifixia!. Barrabás, en este drama, representa al Ego, claro, las multitudes siempre apoyan la existencia del Ego y la muerte del Cristo. Como ya dijimos, terminado ese viaje del Maestro con la Cruz, y habiendo recibido toda clase de vituperios y malos tratos, sin haber pronunciado una palabra de protesta, este Hombre ganó el derecho de morir en la Cruz. La bajó de sus hombros y en ella fue clavado con tres clavos de hierro, símbolo del Alma del Mercurio Sagrado. Fue levantada la Cruz con ese sagrado cuerpo, al lado derecho fue colgado un hombre que se llamó el Buen Ladrón pero, ¿Qué explicación nos han dado de ese enigmático personaje?. Me quiero referir a Dimas, ¿Por qué se le llamó Buen Ladrón? Pues ese hombre es nada menos que un discípulo del Maestro; es el Buen Ladrón porque fue capaz, con la enseñanza y la doctrina que el Maestro le enseñó, robarle el fuego al Diablo, arrancarle a la Naturaleza los misterios que ella tiene ocultos y que no se los entrega a los fornicarios. Ese hombre, Dimas, también para que se cumpliera la palabra, dio testimonio público de que ése era el Cristo, porque él había practicado su doctrina y había logrado también su regeneración y, por este hecho, fue condenado a morir en la Cruz con su Maestro. Gestas, el Mal Ladrón, este hombre ya era un condenado cuando a Jesús se le sentenció y, también para que se cumpliera lo que estaba escrito, lo crucificaron a la izquierda del Maestro. Este hombre, Gestas, es el fornicario, el ladrón, podríamos decir, en términos generales, el hombre pecador. Ya decíamos que el Buen Ladrón le robó el fuego al Diablo y el Mal Ladrón le quitó a su Dios Interno, al Cristo Intimo todos los derechos que sobre su humana persona tenía. Estando todos subidos en la Cruz, aparecieron las Santas Mujeres que habían asistido a todo el drama de la Pasión y Muerte del Maestro; conocían el poder que él ejercía y, por lo tanto, testimoniaban que: ¡Ese era el Superhombre! Tenían que ser mujeres las que hacían esto. Entre esas mujeres estaba María, me refiero a la Santísima Virgen, Madre del Cristo, (nos referimos también a la diferencia que hay entre el Cristo y Jesús); esa mujer que, en su vientre, gestó el Cristo Cósmico, esa Alma Gemela que, como dijera un versículo de un libro sagrado: DONDE ISIS LLORA Y VELA A SU HERMANO BIENAMADO; esa mujer que fue capaz de esculpir al Cristo en ese hombre Jeshuá; esa Virgen casta y pura que supo cumplir a cabalidad con esos tres papeles que cumple una mujer santa: - Fue la hija obediente a Dios. - Fue la esposa de un auténtico hombre. - Fue la Madre del Cristo. Esa mujer que los cristianos la adoramos pero, ¿Por qué la adoramos?, ¿Porque gestó en su vientre a un niño de carne y hueso?, no querido lector, porque en su vientre se gestó el Cristo y si ella fue la Madre del Cristo, por lógico, para nosotros los cristianos, representa nuestra Madre pero, no olvide, querido lector, que todo auténtico hombre que trabaje con esa Isis, tarde o temprano, ella se convertirá en una Madre del Cristo. Este drama que para la mayor parte de la humanidad se presentó hace dos mil años, como si sólo hubiera quedado como una historia, pues para nosotros, los conocedores del Sendero Iniciático, sabemos que este acontecimiento vibra y palpita día y noche en el corazón y en la vida de la persona que toma la decisión de seguir por el camino que este sabio Maestro nos enseñara. Como ya dijimos, El fue crucificado en medio de dos personas, las cuales determinan las condiciones en que se desenvuelve la humanidad: unos buenos y otros malos; pero El no quiso estar ni con los buenos, ni con los malos. El Cristo siempre está en el centro. Gestas le decía: SI EN VERDAD ERES EL HIJO DEL HOMBRE, SI ERES DIOS, SI ERES REY, ¿POR QUE NO TE LIBERAS Y NOS LIBERAS A NOSOTROS?. El Cristo guardaba silencio porque él no estaba allí para demostrar poderes ni violar la Ley; estaba escribiendo un Drama con su vida. Dimas, el Buen Ladrón, le dijo: MAESTRO, CUANDO ESTÉS EN TU REINO, ACUÉRDATE DE MI, y el Cristo le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO. Querido lector, esté Ud., plenamente seguro que si Gestas, en ese crucial momento, en lugar de emplazar al Cristo y vituperarlo, le hubiera pedido perdón y ayuda, él se la hubiera dado igual que a Dimas, porque el Cristo es Amor. Viéndose ya en el Drama en medio de los que le ultrajaban y le maltrataban y haciendo un gran súper-esfuerzo, dijo: PADRE MIO, PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN. Esta sentencia nos cobija a todos porque, como ya dijimos, la ignorancia es atrevida. PARA EL PECADOR TODAS LAS PUERTAS ESTÁN CERRADAS MENOS UNA: LA DEL ARREPENTIMIENTO. El que se arrepienta de lo malo que ha sido en esta vida y en vidas pasadas y busque su propia regeneración, indiscutiblemente, el Padre le perdona. Dándole respuesta a Dimas le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO, ya que para el Cristo no hay un ayer ni un mañana, sólo existe un eterno ahora. En medio de esa tortura y dolor él le dijo al que le pidió ayuda: HOY ESTARÁS CONMIGO. El que sólo sabe sentir a Dios cuando tiene dinero, cuando tiene salud, cuando todo el mundo le aplaude, no ha aprendido a refugiarse en los malos momentos en su Dios Interno. Jesús estaba con su Padre y de lo que su Padre le daba, él ofrecía a su discípulo: el Paraíso. Viendo que al pie de la Cruz se encontraba María (Alma Gemela de Jesús, y Madre del Cristo), y al lado de ella estaba Juan, el discípulo amado, el Evangelista, El le dijo a María: MADRE HE AHÍ A TU HIJO, HIJO HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué frases tan alentadoras para esta humanidad!, cuando el Cristo, dirigiéndose a Juan le dijo: HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué sería de nosotros si no tuviéramos una Madre individual, propia, que cuidara de ese Juan, el Verbo y qué sería de un cristiano que se olvidara de su Madre y quisiera buscar ayuda, apoyo, orientación en otra persona!. Esa Madre del Cristo, María, Isis, Rea, Isoberta, Lakhsmi; esa deidad en cuyo vientre se ha gestado y se gestará el Cristo cada vez que un hombre se levante del lodo de la tierra. Reflexionando el Cristo sobre esta humanidad y sabiendo que en el corazón de cada uno de nosotros vibra y palpita una chispa, una partícula de él atrapada por el Yo, por el Ego y, como ya dijimos, esa partícula que existe en nosotros es una chispa emanada del Cristo, viendo él esa miseria humana, esa pobreza espiritual de nosotros, los humanos, exclamó: "PADRE, ¿PORQUÉ ME HAS ABANDONADO?". Pero entienda, querido lector, él era el Superhombre, el Cristo, él no se estaba quejando de su dolor, pedía piedad al Padre Cósmico por ese Cristo Intimo de nosotros mortales que allá, en el fondo, somos uno mismo con Él. ÉL, en la Cruz, estaba lleno de gloria porque era un victorioso, un triunfante, pero él veía que la humanidad estaba perdida y viendo esa situación en nosotros, criaturas mortales, exclamó: TENGO SED. Y allí se manifestaron las dos características de la humanidad, quizás los amigos de él hubieran querido darle agua, pero fueron más listos los enemigos y le dieron hiel. Pero la lógica nos enseña que él no pedía agua para calmar la sed de ese cuerpo, lo hacía en nombre del Cristo Intimo de la humanidad y dijo: TENGO SED. Ese Cristo Intimo de nosotros, los humanos, atado a esa Cruz de la materia está muriendo de sed, pero, ¿Con qué liquido le vamos a quitar la sed?. Querido lector: Con la castidad, con nuestras mismas aguas genéticas, esa fuente inagotable en la que Él, en vida pública, invitara a la mujer samaritana para que, con su esposo, bebieran de esa fuente y nunca más volvieran a tener sed. De aquel maravilloso simbolismo de las Bodas de Canaán, después de agotado el vino, mando que llenaran las tinajas de agua y las convirtió en vino. ¿Por qué tenía que ser en una Boda? ¿Por qué no en otro acontecimiento?. Esas aguas genéticas, transmutadas mediante la ciencia de la alquimia, se convierten en la sangre del Cordero que lava los pecados Estas cátedras que el Cristo iba dejando en estas simbólicas palabras, tienen íntima relación con su Doctrina, con su mensaje y con la humanidad. Viendo que su hora ya había llegado, exclamó, con gran voz: TODO ESTA CONSUMADO. Es decir, su Obra estaba hecha, su mensaje entregado a la humanidad, su doctrina escrita en la Cruz, pero, claro está, con el corazón conmovido por haber venido al mundo y porque el mundo no lo aceptó. Querido lector, así ha sido, es y seguirá siendo la humanidad. Nunca hemos estado preparados para comprender las enseñanzas de los grandes Maestros, de los grandes Mensajeros enviados del Cielo. Cuando el Cristo estuvo en la Tierra, uno de los que levantaron al pueblo contra El, fue Caifás (Sumo Sacerdote), y aseguraron que el Cristo estaba alzando al pueblo contra el César, contra la religión del pueblo, o sea, que los religiosos de esa época lo mataron. Samael Aun Weor, Kalki Avatara, Buddha Maitreya de la Nueva Era de Acuario, cuando escribió EL MATRIMONIO PERFECTO, horrorizó a todos esos caudillos religiosos que nos han querido mantener en las tinieblas, que sólo quieren el sexo para ser fornicarios, para degenerarse, para ser adúlteros, para tener aberraciones; que no ven el sexo como sagrado, como elemento que crea y vuelve a crear, como la parte que regenera o degenera. En los cristianos que nos resolvemos a cumplir los mandamientos de la Ley de Dios, nos regenera; en los fornicarios, homosexuales, lesbianas, masturbadores, los degenera. La Doctrina del Cristo es fálica ciento por ciento, así los fanáticos predicadores religiosos de esta época lo quieran negar; así esta humanidad perversa y degenerada no lo quiera aceptar. Al fin y al cabo, el Cristo es para todos, pero no todos para el Cristo como él nos lo afirmó. Por último exclamó: PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU. Se unió con su Padre y simbólicamente murió. (VM Lakhsmi)

SÁBADO SANTO Las únicas referencias de la Biblia canónica a lo que sucedió el sábado entre la muerte y resurrección de Jeshuá se encuentra en la Primera epístola de Pedro (3,19; 4,6), en Mateo (27:62-66) y Juan (2:19-21). Después de la puesta del sol del sábado, al final del día de reposo - los sumos sacerdotes y fariseos fueron a Poncio Pilato y le pidieron que un guardia se colocara en la tumba de Jesús para evitar que sus discípulos sacaran y llevaran el cuerpo. Se acordab...Continue reading

JUEVES SANTO Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y habiendo dado gracias, lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. Esto es mi cuerpo. Y tomand...o el vaso, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de él todos; porque esto es mi sangre del Nuevo Testamento, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados. Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo que beber nuevo con vosotros en el Reino de mi Padre. Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas. Entonces Jesús les dice: Todos vosotros seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al Pastor, y las ovejas de la manada serán dispersas. Transubstanciación y origen de la misma La Última Cena es una ceremonia mágica de inmenso poder. Algo muy similar a la ceremonia de la Hermandad de la Sangre. La tradición de esta hermandad dice que si dos o más personas mezclan su sangre entre una copa y luego beben de ella, quedan hermanados eternamente por la sangre. Los vehículos astrales de estas personas se asocian entonces íntimamente para toda la eternidad. El pueblo hebreo atribuye a la sangre características de un tipo muy especial. La última cena fue una ceremonia de sangre. Los apóstoles trajeron cada uno en su copa, gotas de su propia sangre, y vaciaron estas gotas en el cáliz del Cristo Jesús. En ese cáliz, el Adorable había echado también su sangre real. Así, entre el Santo Grial, se mezcló la sangre del Cristo Jesús con la sangre de sus discípulos. Cuenta la tradición que Jesús también les dio a comer a sus discípulos partículas infinitesimales de su propia carne. Y tomando el pan, habiendo dado gracias, lo partió y les dio diciendo: "Este es mi cuerpo que por vosotros es dado. Haced esto en memoria de mí". Así mismo también el vaso, después que hubo cenado diciendo: "Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama". Así se firmó el pacto. Todo pacto se firma con sangre. El Astral del Cristo Jesús quedó asociado, unido a sus discípulos y a toda la humanidad, por el pacto de sangre. El Adorable es el Salvador del mundo. Esta ceremonia de sangre es tan antigua como el infinito. Todos los grandes Avataras la han verificado desde los antiguos tiempos. El Gran Señor de la Atlántida también realizó la Última Cena con sus discípulos. Toda Unción Gnóstica, sea cualquiera el culto o creencia, secta o religión, está asociada, unida íntimamente a la Última Cena del Adorable, por el pacto de Sangre. Cuando varias personas se reúnen alrededor de una mesa para celebrar la Santa Unción, tal como Cristo nos la enseñó en casa de José de Arimatea, allí está la invisible presencia del mártir del calvario, porque bien claro habló el Maestro cuando dijo: "Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre; allí estoy en medio de ellos". En el Pan y Vino Consagrados, se hallan átomos Crísticos de altísimo voltaje que nos nutren y vivifican para fortalecernos en la Gran Obra... "YO soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, le quitará: y todo aquel que lleva fruto, le limpiará, para que lleve más fruto. Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado. Estad en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no estuviere en la vid; así ni vosotros, si no estuviereis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer. El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden. Si estuviereis en mí, y mis palabras estuvieren en vosotros, pedid todo lo que quisiereis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos."

JUEVES SANTO Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y habiendo dado gracias, lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. Esto es mi cuerpo. Y tomand...o el vaso, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de él todos; porque esto es mi sangre del Nuevo Testamento, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados. Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo que beber nuevo con vosotros en el Reino de mi Padre. Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas. Entonces Jesús les dice: Todos vosotros seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al Pastor, y las ovejas de la manada serán dispersas. Transubstanciación y origen de la misma La Última Cena es una ceremonia mágica de inmenso poder. Algo muy similar a la ceremonia de la Hermandad de la Sangre. La tradición de esta hermandad dice que si dos o más personas mezclan su sangre entre una copa y luego beben de ella, quedan hermanados eternamente por la sangre. Los vehículos astrales de estas personas se asocian entonces íntimamente para toda la eternidad. El pueblo hebreo atribuye a la sangre características de un tipo muy especial. La última cena fue una ceremonia de sangre. Los apóstoles trajeron cada uno en su copa, gotas de su propia sangre, y vaciaron estas gotas en el cáliz del Cristo Jesús. En ese cáliz, el Adorable había echado también su sangre real. Así, entre el Santo Grial, se mezcló la sangre del Cristo Jesús con la sangre de sus discípulos. Cuenta la tradición que Jesús también les dio a comer a sus discípulos partículas infinitesimales de su propia carne. Y tomando el pan, habiendo dado gracias, lo partió y les dio diciendo: "Este es mi cuerpo que por vosotros es dado. Haced esto en memoria de mí". Así mismo también el vaso, después que hubo cenado diciendo: "Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama". Así se firmó el pacto. Todo pacto se firma con sangre. El Astral del Cristo Jesús quedó asociado, unido a sus discípulos y a toda la humanidad, por el pacto de sangre. El Adorable es el Salvador del mundo. Esta ceremonia de sangre es tan antigua como el infinito. Todos los grandes Avataras la han verificado desde los antiguos tiempos. El Gran Señor de la Atlántida también realizó la Última Cena con sus discípulos. Toda Unción Gnóstica, sea cualquiera el culto o creencia, secta o religión, está asociada, unida íntimamente a la Última Cena del Adorable, por el pacto de Sangre. Cuando varias personas se reúnen alrededor de una mesa para celebrar la Santa Unción, tal como Cristo nos la enseñó en casa de José de Arimatea, allí está la invisible presencia del mártir del calvario, porque bien claro habló el Maestro cuando dijo: "Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre; allí estoy en medio de ellos". En el Pan y Vino Consagrados, se hallan átomos Crísticos de altísimo voltaje que nos nutren y vivifican para fortalecernos en la Gran Obra... "YO soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, le quitará: y todo aquel que lleva fruto, le limpiará, para que lleve más fruto. Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado. Estad en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no estuviere en la vid; así ni vosotros, si no estuviereis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer. El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden. Si estuviereis en mí, y mis palabras estuvieren en vosotros, pedid todo lo que quisiereis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos."

VIERNES SANTO "Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado. Y tomaron a Jesús, y le llevaron. Y llevando su cruz, salió al lugar que se dice ...de la Calavera, y en hebreo, Gólgotha, donde le crucificaron y con él otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio. Y escribió también Pilatos un título, que puso encima de la cruz. Y el escrito era: JESUS NAZARENO, REY DE LOS JUDÍOS. Y muchos de los Judíos leyeron este título: porque el lugar donde estaba crucificado Jesús era cerca de la ciudad y estaba escrito en hebreo, en griego y en latín. Y decían a Pilatos los pontífices de los Judíos: No escribas, Rey de los Judíos sino que él dijo: Rey soy de los Judíos. Respondió Pilatos: Lo que he escrito, he escrito." LAS SIETE PALABRAS COMO CÁTEDRA PARA LA CONCIENCIA Cuando el Maestro hizo todo el recorrido con su Cruz a cuestas, recibió todos los atropellos contra su dignidad humana y contra su mensaje. Lo hicieron las multitudes por orden de Caifás. Caifás era el Sumo Sacerdote, símbolo de la mala voluntad, que Pilatos no quiso contener y, éste, para justificar la muerte del Maestro, preguntó a las multitudes qué preferían si la crucifixión y muerte de Jesús o la crucifixión y muerte de Barrabás. Y las multitudes gritaban, refiriéndose a Jesús: ¡Crucifixia!, ¡Crucifixia!. Barrabás, en este drama, representa al Ego, claro, las multitudes siempre apoyan la existencia del Ego y la muerte del Cristo. Como ya dijimos, terminado ese viaje del Maestro con la Cruz, y habiendo recibido toda clase de vituperios y malos tratos, sin haber pronunciado una palabra de protesta, este Hombre ganó el derecho de morir en la Cruz. La bajó de sus hombros y en ella fue clavado con tres clavos de hierro, símbolo del Alma del Mercurio Sagrado. Fue levantada la Cruz con ese sagrado cuerpo, al lado derecho fue colgado un hombre que se llamó el Buen Ladrón pero, ¿Qué explicación nos han dado de ese enigmático personaje?. Me quiero referir a Dimas, ¿Por qué se le llamó Buen Ladrón? Pues ese hombre es nada menos que un discípulo del Maestro; es el Buen Ladrón porque fue capaz, con la enseñanza y la doctrina que el Maestro le enseñó, robarle el fuego al Diablo, arrancarle a la Naturaleza los misterios que ella tiene ocultos y que no se los entrega a los fornicarios. Ese hombre, Dimas, también para que se cumpliera la palabra, dio testimonio público de que ése era el Cristo, porque él había practicado su doctrina y había logrado también su regeneración y, por este hecho, fue condenado a morir en la Cruz con su Maestro. Gestas, el Mal Ladrón, este hombre ya era un condenado cuando a Jesús se le sentenció y, también para que se cumpliera lo que estaba escrito, lo crucificaron a la izquierda del Maestro. Este hombre, Gestas, es el fornicario, el ladrón, podríamos decir, en términos generales, el hombre pecador. Ya decíamos que el Buen Ladrón le robó el fuego al Diablo y el Mal Ladrón le quitó a su Dios Interno, al Cristo Intimo todos los derechos que sobre su humana persona tenía. Estando todos subidos en la Cruz, aparecieron las Santas Mujeres que habían asistido a todo el drama de la Pasión y Muerte del Maestro; conocían el poder que él ejercía y, por lo tanto, testimoniaban que: ¡Ese era el Superhombre! Tenían que ser mujeres las que hacían esto. Entre esas mujeres estaba María, me refiero a la Santísima Virgen, Madre del Cristo, (nos referimos también a la diferencia que hay entre el Cristo y Jesús); esa mujer que, en su vientre, gestó el Cristo Cósmico, esa Alma Gemela que, como dijera un versículo de un libro sagrado: DONDE ISIS LLORA Y VELA A SU HERMANO BIENAMADO; esa mujer que fue capaz de esculpir al Cristo en ese hombre Jeshuá; esa Virgen casta y pura que supo cumplir a cabalidad con esos tres papeles que cumple una mujer santa: - Fue la hija obediente a Dios. - Fue la esposa de un auténtico hombre. - Fue la Madre del Cristo. Esa mujer que los cristianos la adoramos pero, ¿Por qué la adoramos?, ¿Porque gestó en su vientre a un niño de carne y hueso?, no querido lector, porque en su vientre se gestó el Cristo y si ella fue la Madre del Cristo, por lógico, para nosotros los cristianos, representa nuestra Madre pero, no olvide, querido lector, que todo auténtico hombre que trabaje con esa Isis, tarde o temprano, ella se convertirá en una Madre del Cristo. Este drama que para la mayor parte de la humanidad se presentó hace dos mil años, como si sólo hubiera quedado como una historia, pues para nosotros, los conocedores del Sendero Iniciático, sabemos que este acontecimiento vibra y palpita día y noche en el corazón y en la vida de la persona que toma la decisión de seguir por el camino que este sabio Maestro nos enseñara. Como ya dijimos, El fue crucificado en medio de dos personas, las cuales determinan las condiciones en que se desenvuelve la humanidad: unos buenos y otros malos; pero El no quiso estar ni con los buenos, ni con los malos. El Cristo siempre está en el centro. Gestas le decía: SI EN VERDAD ERES EL HIJO DEL HOMBRE, SI ERES DIOS, SI ERES REY, ¿POR QUE NO TE LIBERAS Y NOS LIBERAS A NOSOTROS?. El Cristo guardaba silencio porque él no estaba allí para demostrar poderes ni violar la Ley; estaba escribiendo un Drama con su vida. Dimas, el Buen Ladrón, le dijo: MAESTRO, CUANDO ESTÉS EN TU REINO, ACUÉRDATE DE MI, y el Cristo le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO. Querido lector, esté Ud., plenamente seguro que si Gestas, en ese crucial momento, en lugar de emplazar al Cristo y vituperarlo, le hubiera pedido perdón y ayuda, él se la hubiera dado igual que a Dimas, porque el Cristo es Amor. Viéndose ya en el Drama en medio de los que le ultrajaban y le maltrataban y haciendo un gran súper-esfuerzo, dijo: PADRE MIO, PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN. Esta sentencia nos cobija a todos porque, como ya dijimos, la ignorancia es atrevida. PARA EL PECADOR TODAS LAS PUERTAS ESTÁN CERRADAS MENOS UNA: LA DEL ARREPENTIMIENTO. El que se arrepienta de lo malo que ha sido en esta vida y en vidas pasadas y busque su propia regeneración, indiscutiblemente, el Padre le perdona. Dándole respuesta a Dimas le dijo: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO, ya que para el Cristo no hay un ayer ni un mañana, sólo existe un eterno ahora. En medio de esa tortura y dolor él le dijo al que le pidió ayuda: HOY ESTARÁS CONMIGO. El que sólo sabe sentir a Dios cuando tiene dinero, cuando tiene salud, cuando todo el mundo le aplaude, no ha aprendido a refugiarse en los malos momentos en su Dios Interno. Jesús estaba con su Padre y de lo que su Padre le daba, él ofrecía a su discípulo: el Paraíso. Viendo que al pie de la Cruz se encontraba María (Alma Gemela de Jesús, y Madre del Cristo), y al lado de ella estaba Juan, el discípulo amado, el Evangelista, El le dijo a María: MADRE HE AHÍ A TU HIJO, HIJO HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué frases tan alentadoras para esta humanidad!, cuando el Cristo, dirigiéndose a Juan le dijo: HE AHÍ A TU MADRE. ¡Qué sería de nosotros si no tuviéramos una Madre individual, propia, que cuidara de ese Juan, el Verbo y qué sería de un cristiano que se olvidara de su Madre y quisiera buscar ayuda, apoyo, orientación en otra persona!. Esa Madre del Cristo, María, Isis, Rea, Isoberta, Lakhsmi; esa deidad en cuyo vientre se ha gestado y se gestará el Cristo cada vez que un hombre se levante del lodo de la tierra. Reflexionando el Cristo sobre esta humanidad y sabiendo que en el corazón de cada uno de nosotros vibra y palpita una chispa, una partícula de él atrapada por el Yo, por el Ego y, como ya dijimos, esa partícula que existe en nosotros es una chispa emanada del Cristo, viendo él esa miseria humana, esa pobreza espiritual de nosotros, los humanos, exclamó: "PADRE, ¿PORQUÉ ME HAS ABANDONADO?". Pero entienda, querido lector, él era el Superhombre, el Cristo, él no se estaba quejando de su dolor, pedía piedad al Padre Cósmico por ese Cristo Intimo de nosotros mortales que allá, en el fondo, somos uno mismo con Él. ÉL, en la Cruz, estaba lleno de gloria porque era un victorioso, un triunfante, pero él veía que la humanidad estaba perdida y viendo esa situación en nosotros, criaturas mortales, exclamó: TENGO SED. Y allí se manifestaron las dos características de la humanidad, quizás los amigos de él hubieran querido darle agua, pero fueron más listos los enemigos y le dieron hiel. Pero la lógica nos enseña que él no pedía agua para calmar la sed de ese cuerpo, lo hacía en nombre del Cristo Intimo de la humanidad y dijo: TENGO SED. Ese Cristo Intimo de nosotros, los humanos, atado a esa Cruz de la materia está muriendo de sed, pero, ¿Con qué liquido le vamos a quitar la sed?. Querido lector: Con la castidad, con nuestras mismas aguas genéticas, esa fuente inagotable en la que Él, en vida pública, invitara a la mujer samaritana para que, con su esposo, bebieran de esa fuente y nunca más volvieran a tener sed. De aquel maravilloso simbolismo de las Bodas de Canaán, después de agotado el vino, mando que llenaran las tinajas de agua y las convirtió en vino. ¿Por qué tenía que ser en una Boda? ¿Por qué no en otro acontecimiento?. Esas aguas genéticas, transmutadas mediante la ciencia de la alquimia, se convierten en la sangre del Cordero que lava los pecados Estas cátedras que el Cristo iba dejando en estas simbólicas palabras, tienen íntima relación con su Doctrina, con su mensaje y con la humanidad. Viendo que su hora ya había llegado, exclamó, con gran voz: TODO ESTA CONSUMADO. Es decir, su Obra estaba hecha, su mensaje entregado a la humanidad, su doctrina escrita en la Cruz, pero, claro está, con el corazón conmovido por haber venido al mundo y porque el mundo no lo aceptó. Querido lector, así ha sido, es y seguirá siendo la humanidad. Nunca hemos estado preparados para comprender las enseñanzas de los grandes Maestros, de los grandes Mensajeros enviados del Cielo. Cuando el Cristo estuvo en la Tierra, uno de los que levantaron al pueblo contra El, fue Caifás (Sumo Sacerdote), y aseguraron que el Cristo estaba alzando al pueblo contra el César, contra la religión del pueblo, o sea, que los religiosos de esa época lo mataron. Samael Aun Weor, Kalki Avatara, Buddha Maitreya de la Nueva Era de Acuario, cuando escribió EL MATRIMONIO PERFECTO, horrorizó a todos esos caudillos religiosos que nos han querido mantener en las tinieblas, que sólo quieren el sexo para ser fornicarios, para degenerarse, para ser adúlteros, para tener aberraciones; que no ven el sexo como sagrado, como elemento que crea y vuelve a crear, como la parte que regenera o degenera. En los cristianos que nos resolvemos a cumplir los mandamientos de la Ley de Dios, nos regenera; en los fornicarios, homosexuales, lesbianas, masturbadores, los degenera. La Doctrina del Cristo es fálica ciento por ciento, así los fanáticos predicadores religiosos de esta época lo quieran negar; así esta humanidad perversa y degenerada no lo quiera aceptar. Al fin y al cabo, el Cristo es para todos, pero no todos para el Cristo como él nos lo afirmó. Por último exclamó: PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU. Se unió con su Padre y simbólicamente murió. (VM Lakhsmi)

JUEVES SANTO Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y habiendo dado gracias, lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. Esto es mi cuerpo. Y tomand...o el vaso, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de él todos; porque esto es mi sangre del Nuevo Testamento, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados. Y os digo, que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo tengo que beber nuevo con vosotros en el Reino de mi Padre. Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas. Entonces Jesús les dice: Todos vosotros seréis escandalizados en mí esta noche; porque escrito está: Heriré al Pastor, y las ovejas de la manada serán dispersas. Transubstanciación y origen de la misma La Última Cena es una ceremonia mágica de inmenso poder. Algo muy similar a la ceremonia de la Hermandad de la Sangre. La tradición de esta hermandad dice que si dos o más personas mezclan su sangre entre una copa y luego beben de ella, quedan hermanados eternamente por la sangre. Los vehículos astrales de estas personas se asocian entonces íntimamente para toda la eternidad. El pueblo hebreo atribuye a la sangre características de un tipo muy especial. La última cena fue una ceremonia de sangre. Los apóstoles trajeron cada uno en su copa, gotas de su propia sangre, y vaciaron estas gotas en el cáliz del Cristo Jesús. En ese cáliz, el Adorable había echado también su sangre real. Así, entre el Santo Grial, se mezcló la sangre del Cristo Jesús con la sangre de sus discípulos. Cuenta la tradición que Jesús también les dio a comer a sus discípulos partículas infinitesimales de su propia carne. Y tomando el pan, habiendo dado gracias, lo partió y les dio diciendo: "Este es mi cuerpo que por vosotros es dado. Haced esto en memoria de mí". Así mismo también el vaso, después que hubo cenado diciendo: "Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama". Así se firmó el pacto. Todo pacto se firma con sangre. El Astral del Cristo Jesús quedó asociado, unido a sus discípulos y a toda la humanidad, por el pacto de sangre. El Adorable es el Salvador del mundo. Esta ceremonia de sangre es tan antigua como el infinito. Todos los grandes Avataras la han verificado desde los antiguos tiempos. El Gran Señor de la Atlántida también realizó la Última Cena con sus discípulos. Toda Unción Gnóstica, sea cualquiera el culto o creencia, secta o religión, está asociada, unida íntimamente a la Última Cena del Adorable, por el pacto de Sangre. Cuando varias personas se reúnen alrededor de una mesa para celebrar la Santa Unción, tal como Cristo nos la enseñó en casa de José de Arimatea, allí está la invisible presencia del mártir del calvario, porque bien claro habló el Maestro cuando dijo: "Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre; allí estoy en medio de ellos". En el Pan y Vino Consagrados, se hallan átomos Crísticos de altísimo voltaje que nos nutren y vivifican para fortalecernos en la Gran Obra... "YO soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, le quitará: y todo aquel que lleva fruto, le limpiará, para que lleve más fruto. Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado. Estad en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no estuviere en la vid; así ni vosotros, si no estuviereis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer. El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden. Si estuviereis en mí, y mis palabras estuvieren en vosotros, pedid todo lo que quisiereis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos."

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