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Soy cristiano y no soy perfecto. Una vez escuché a alguien decir me caen mal los cristianos porque se sienten perfectos y me puso a pensar... Tristemente hay ...cristianos que piensan que son perfectos o que tienen derecho a juzgar y señalar, cuando realmente su vida sigue vacía. Ser cristiano no significa ser perfecto, sino que significa que seguimos a aquel que dio su vida por nosotros para que dentro de nuestra debilidad humana pudiéramos tener propósito y esperanza. Soy cristiano y no soy perfecto, soy cristiano y reconozco que soy débil pero sólo Jesús me hace fuerte. Soy cristiano y no me avergüenzo. . . Síguenos en Instagram. https://instagram.com/graciabastatemi?igshid=jqy2ozg33xg8 See more

La fe es la llave que te permite abrir la puerta a las bendiciones de Dios. #FeEsAvanzar Catedral de la Fe

Vivir con propósito nos mantiene animados. Dios es bueno y nos permite servirle. Por eso no nos desanimamos. 2Corintios 4.1 Claro que hay días en dónde algunas ...emociones nos hacen sentir sin las fuerzas necesarias, sin el valor o la decisión suficiente para avanzar sobre lo que tenemos que hacer. Lo que no debemos permitir es que esa sensación se transforme en un estado de ánimo que nos atrape. Entonces ¿Hay alguna forma de batallar con ese desánimo? levantarnos rápidamente y saber que hay un propósito por el cual nos levantamos todos los días a metas que tenemos que alcanzar. Al parecer la vida nos presenta algunas veces un cerco de desalientos, con las cuales podemos aprendemos a batallar ya que en definitiva es cosa nuestra. Por otro lado, las personas de fe entienden que, frente a esa debilidad del alma, se puede abrir la puerta para que Cristo nos rodee con su gloria, y reconozcamos nuestra absoluta dependencia de Él. El apóstol Pablo nos dice que de esa manera encontraba la motivación necesaria para no desanimarse. John Piper dice que el desánimo, el estar agotados, es como carecer de recursos. Es como si nuestra vida fuera un tanque lleno de agua y alguien removiera el tapón que está en la parte inferior y dejara escapar toda el agua. De donde quiera que provenga este desánimo es la incredulidad la raíz de ceder al desánimo, de no poner resistencia, de no utilizar el escudo de la fe y la espada del espíritu para dar batalla. El rey David en el Salmo 19:7, dice: "La ley del SEÑOR es perfecta, que restaura el alma." Entonces tenemos que entender que La palabra de Dios ha sido dada para reactivar las almas. Podemos ser restaurados, ¡revivir! Por medio de la acción de esa palabra en nuestro espíritu. Tomemos entonces la expresión de la carta a los corintios y las claves está a la vista: una espiritual Dios es bueno. Este conocimiento alimenta a mi ser interior, mi espíritu se activa. La segunda tiene que ver con una acción de propósito: y nos permite servirle. Tengo un fin sobre el cual dirigir mi vida, mis capacidades, dones, talentos, tienen como objetivo el servir a los demás. Son estas dos cosas básicas, las que permiten que no nos desanimemos dice el apóstol Pablo. ¿Qué tienes en mente al iniciar una jornada? toma el motivo espiritual Dios es bueno y su amor no se agota jamás. ¿Cuál es el motivo que me impulsará a moverme en este día? que tengo trabajo por hacer. Todo mi potencial tiene como propósito sembrar las semillas necesarias para beneficiar también a otros. ¿Habría motivos para desanimarnos? Sí por supuestos, pero ninguno es tan poderoso como para detenernos. Por eso, aunque pasamos por muchas dificultades, no nos desanimamos. Tenemos preocupaciones, pero no perdemos la calma. La gente nos persigue, pero Dios no nos abandona. Nos hacen caer, pero no nos destruyen. (2Corintios 4:8,9) Batallamos contra el desánimo y avanzamos para lograr las metas del servicio. Somos gente de propósito. Amén. Dr. Moisés Riffo Arteaga