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SAN LUCAS Grupo Médico 12.07.2021

Una excelente solución para eliminar el bello. Un tratamiento sencillo, seguro y efectivo, que te permitirá disfrutar una piel suave y sin pelo. No te quedes sin tu turno reserva 470544 / 489194

SAN LUCAS Grupo Médico 02.07.2021

Una excelente solución para eliminar el bello. Un tratamiento sencillo, seguro y efectivo, que te permitirá disfrutar una piel suave y sin pelo. No te quedes sin tu turno reserva 470544 / 489194

SAN LUCAS Grupo Médico 25.06.2021

Parte de la muestra "Sueño torrencial" del artista Daniel Monsalvo jerarquiza las paredes de San Lucas.

SAN LUCAS Grupo Médico 17.06.2021

Parte de la muestra "Sueño torrencial" del artista Daniel Monsalvo jerarquiza las paredes de San Lucas.

SAN LUCAS Grupo Médico 15.06.2021

En estas fiestas lucí ese vestido que tanto querés, sin preocuparte por tu bronceado

SAN LUCAS Grupo Médico 11.06.2021

En estas fiestas lucí ese vestido que tanto querés, sin preocuparte por tu bronceado

SAN LUCAS Grupo Médico 29.05.2021

Feliz día !! en especial para nuestros médicos .

SAN LUCAS Grupo Médico 22.05.2021

Feliz día !! en especial para nuestros médicos .

SAN LUCAS Grupo Médico 16.05.2021

Feliz día del radiólogo, Licenciada Verónica Feccia.Feliz día del radiólogo, Licenciada Verónica Feccia.

SAN LUCAS Grupo Médico 09.05.2021

TE LLEVÁS TU MOCHILA Y NO SABÉS SI VAS A VOLVER A VER A TU FAMILIA Conversación con un médico recuperado de Covid-19. Reflexiones sobre su experiencia persona...l y su mirada sobre el contexto general. La Pandemia que estamos padeciendo, que comenzó en diciembre del año pasado en Wuhan, China, y se extendió a todo el mundo ocasionando una situación inédita en nuestros tiempos, colocó a las sociedades al borde del colapso en cuanto a asistencia médica y obligó a los gobiernos a implementar medidas de restricción de movimiento de las personas así como generar ayudas solidarias para paliar las necesidades básicas de gran parte de la población, nos invita a reflexionar. En este espacio conversamos con el Dr Ariel Mazza, psiquiatra rosarino que honesta y libremente comparte con nosotros sus reflexiones. El día que me empecé a sentir mal, lo que más me preocupaba, además de la fiebre, era la falta de aire. Me hisoparon, al día siguiente tuve el resultado positivo, y así fue transcurriendo el día hasta que decidieron internarme para realizar estudios y comenzar el tratamiento. Dolores musculares, fiebre o tos, son todos síntomas que alguna vez alguien tuvo pero el hecho de no poder respirar, la sensación de ahogo, tan cercana a la angustia, es lo más llamativo. Tal vez muchos médicos llevemos con nosotros una sensación de poder que nos da el conocimiento de las enfermedades, cuando se enfrentan este tipo de situaciones aparece la noción de lo vulnerable que todos somos, algo que Ariel sintió en carne propia: Ahí uno se da cuenta de que no puede hacer nada y que necesita que lo ayuden. Y el hecho de irse a un lugar en donde uno sabe que va a estar solo, que nadie te puede acompañar. Te subís a la ambulancia y estás solo. Te llevás tu mochila y no sabés si vas a volver a ver a tu familia. Es algo que todos quienes pasaron por este proceso lo remarcan como algo difícil. Más allá de que hoy la tecnología permite estar en contacto a través del teléfono, mensajes, videollamadas, uno está solo. Resalta el papel que cumplen enfermeras y enfermeros en la asistencia de los pacientes con COVID. Quien más interactúa con uno es el personal de enfermería. Más que los médicos y el resto. El enfermero es el que más veces entra, el que más te ve, a quien le podés preguntar. Muchas veces se habla del equipo de salud y de los médicos, pero los enfermeros son los que más cerca y más tiempo están. Y por eso es tan importante la palabra de aliento, de contención, de tranquilidad, de los enfermeros. Se termina estableciendo una relación de contacto. Estuve ocho días, y ya reconocía a los que volvían en los mismos horarios. Supongo que para ellos debe ser una carga importante, porque entiendo que los pacientes les depositan a ellos su angustia. Preguntado sobre sus sentimientos frente al proceso de la enfermedad nos cuenta: Sentí miedo, temor. El hecho de ser médico y saber qué puede pasar, y los detalles de las radiografías, los análisis, el monitoreo, hacen que podamos estar sufriendo un poco más. Yo no estuve en terapia. No tuve un miedo exagerado pero sí un temor por no saber lo que iba a pasar. Eso a veces es difícil poder manejarlo. A veces se necesita de algún ansiolítico, poder descansar. Ante la pregunta sobre qué sentiste que perdías contesta con humor: El olfato perdí. Uno se siente muy vulnerable. La pérdida de la autonomía. No poder levantarte, no poder respirar, estar con suero durante tantos días. No poder manejarte independientemente. Que te ayudaran a bañarte. Ponerse en manos de otro, sentirse vulnerable y necesitar ayuda. En buen estado y ya reintegrado a sus tareas habituales conversamos sobre cuál era su actitud frente a la pandemia y si ésta cambió luego de semejante experiencia. El tiempo que transcurrió hasta ahora hace que uno vaya cambiando su forma de pensar y de ver qué pasa con todo esto, tanto acá como en el resto del mundo. Son diferentes realidades económicas. Uno cambia también. Desde la incredulidad, de creer que a nosotros no nos va a tocar, de sentirnos inmunes. Nos fuimos dando cuenta que los médicos también nos vamos a enfermar, es más, con mayor responsabilidad de riesgo. Como en toda situación límite, tanto para las personas como para la sociedad aparece lo bueno y lo malo, lo peor. Aparecen los ejemplos de solidaridad, de sacrificio, personal esencial que trabaja y se arriesga por el otro. También aparece mucho el egoísmo, el salvarse uno, pensar que uno se salva solo y que el resto se arregle. Eso también aparece. Es muy difícil salvarse solo. O se afrontan las situaciones todos juntos o pasa lo que pasa, esta extraña división en que algunos piensan que lo más importante es la salud y que hay que tomar las decisiones en función de eso y quienes piensan que lo importante es que la gente tenga trabajo y pueda entretenerse y divertirse y estrechar sus lazos sociales y familiares y que la salud pasa a segundo plano. No sé quién tiene la respuesta, no creo que nadie la tenga, sucede en todos lados, más en países como el nuestro, en que desde el punto de vista económico somos los más perjudicados. Yo no tengo una respuesta. Son posiciones muy irreductibles y eso tampoco está bueno. Lo bueno estaría en abrir un poco la cabeza y contemplar todos los aspectos. Creo que es difícil y quienes tienen que tomar decisiones están en ese brete. Preguntado sobre si ve diferencias en los medios público y privado de atención médica dice: Yo trabajé en un hospital, en medio de la pandemia pasé a otro tipo de institución, y estuve internado en un sanatorio privado. Entiendo que no hay diferencia en cuanto al éxito del tratamiento en un lugar o en otro. Esta enfermedad se trata de una manera sencilla. Los estudios diagnósticos son sencillos, los tratamientos también. Antibióticos, corticoides, oxígeno, respiradores. No se requiere de una tecnología que haga diferencia. Creo que la articulación entre lo público y lo privado nunca fue fácil, ahora tampoco. Sin embargo me parece que primó cierta responsabilidad en ambos sectores, público y privado, y de alguna manera se fueron absorbiendo los costos de la mejor manera. Le preguntamos cómo ve la actitud del estado frente a la pandemia: Creo que los estados deben tener humildad. Me molesta mucho la soberbia, cuando se utiliza esto políticamente. Cuando te va bien somos los mejores del mundo, bien argentino, y ahora que estamos complicados somos los peores. Creo que los estados deben ser responsables y que no se utilice esto ni de un lado ni del otro. Es difícil comparar países tan distintos en su desarrollo, en su economía, en sus cuestiones culturales. Imposible comparar China con Francia, con Suecia o Argentina. Cada país tiene realidades tan diferentes que a veces lo que se hace en un lugar no sirve para el otro. Así estamos. Creo que la gente está muy cansada, no hay un horizonte en cuanto a cuándo esto puede terminar y lo que no se sabe cuándo termina ni cómo genera incertidumbre y angustia. Si supiéramos que esto dura hasta el 22 de abril y ese día hacemos una gran fiesta y cada uno hace lo que quiere sería mucho más fácil de sobrellevar. Hoy no se sabe si termina en diciembre, en marzo, en junio, y eso genera angustia en la gente, más allá de los problemas económicos que pueda tener cada uno, me refiero a esta forma de vivir, de convivir con la pandemia. Ahora mucha gente siente malestar y cada uno tiene sus métodos y su herramienta para adaptarse a determinada situación. Hay que gente que le cuesta más y otros a los que les cuesta menos. En un principio parecía hasta simpático, todos cocinaban, hacían gimnasia delante del televisor, reuniones de zoom, encuentros virtuales. Con el tiempo eso se fue perdiendo y hay bastante cansancio. Desde su mirada de psiquiatra cómo ve repercutir la pandemia en la salud mental de las personas: Creo que como toda situación médica, o que genera estados tensionales, una situación inédita, agudiza lo preexistente, que a veces es manifiesto y a veces no. Aquellas personas que podían tener una conducta obsesiva, temerosa, o con ciertos rasgos de cuidado sobre su salud, ahora se agudiza. Así como también quien no respeta las normativas, o ejerce conducta de tipo sociopática, rebelde, o de no atenerse a lo que la sociedad estipula también se agudiza y rompe esas normas. Este es un campo propicio para romperlas más aún. También en personas que no tenían este tipo de problemática pueden aparecer síntomas relacionados con esto. Recordaba el libro de Saramago Ensayo sobre la ceguera y el de Camus La peste, creo que reflejan las conductas de las personas en situaciones como esta. Pienso que algunas personas pueden cambiar conductas en cuanto a cuidados, responsabilidades, solidaridad. Sin creer que a partir de ahora vamos a ser diferentes como personas o como sociedad, no creo eso. Cuando todo esto pase vamos a volver a ser como éramos pero a algunas personas puede ocurrirle elaborar algunas ideas para tener una nueva actitud. Yo asocio esto con la ecología, con el cuidado del medio ambiente, sobre todo en los jóvenes. Nos preguntamos en qué mundo estamos viviendo, y cómo nos hacemos cargo del medio ambiente y del mundo. Pensar en una alimentación más saludable, hábitos más saludables. También puede dejar muchas secuelas sobre todo quienes han perdido a un ser querido, un familiar, pueden verse afectados. Acostumbrados a pensar sobre la salud de los otros, es duro para los profesionales de la salud sentir en persona el padecimiento que la enfermedad genera. Ojalá esto pueda contribuir a producir en la medicina una mirada más humanitaria, deteriorada en las décadas pasadas en función de las tecnologías y el poco tiempo disponible para la relación médico-paciente. Agradecemos la generosa contribución del Dr Ariel Mazza, resaltamos la labor de tantos médicos y enfermeros y resto del personal esencial que trabajan a destajo para atender y ayudar a una enorme cantidad de enfermos. Dedicamos este artículo a quienes debieron sufrir una pérdida familiar por Covid 19, y recordamos en particular al Dr Carlos Trillini, colega de Armstrong que perdió la vida trabajando en la pandemia. Dr Raúl Feroglio Médico en Las Parejas Santa Fe- Argentina

SAN LUCAS Grupo Médico 03.05.2021

TE LLEVÁS TU MOCHILA Y NO SABÉS SI VAS A VOLVER A VER A TU FAMILIA Conversación con un médico recuperado de Covid-19. Reflexiones sobre su experiencia persona...l y su mirada sobre el contexto general. La Pandemia que estamos padeciendo, que comenzó en diciembre del año pasado en Wuhan, China, y se extendió a todo el mundo ocasionando una situación inédita en nuestros tiempos, colocó a las sociedades al borde del colapso en cuanto a asistencia médica y obligó a los gobiernos a implementar medidas de restricción de movimiento de las personas así como generar ayudas solidarias para paliar las necesidades básicas de gran parte de la población, nos invita a reflexionar. En este espacio conversamos con el Dr Ariel Mazza, psiquiatra rosarino que honesta y libremente comparte con nosotros sus reflexiones. El día que me empecé a sentir mal, lo que más me preocupaba, además de la fiebre, era la falta de aire. Me hisoparon, al día siguiente tuve el resultado positivo, y así fue transcurriendo el día hasta que decidieron internarme para realizar estudios y comenzar el tratamiento. Dolores musculares, fiebre o tos, son todos síntomas que alguna vez alguien tuvo pero el hecho de no poder respirar, la sensación de ahogo, tan cercana a la angustia, es lo más llamativo. Tal vez muchos médicos llevemos con nosotros una sensación de poder que nos da el conocimiento de las enfermedades, cuando se enfrentan este tipo de situaciones aparece la noción de lo vulnerable que todos somos, algo que Ariel sintió en carne propia: Ahí uno se da cuenta de que no puede hacer nada y que necesita que lo ayuden. Y el hecho de irse a un lugar en donde uno sabe que va a estar solo, que nadie te puede acompañar. Te subís a la ambulancia y estás solo. Te llevás tu mochila y no sabés si vas a volver a ver a tu familia. Es algo que todos quienes pasaron por este proceso lo remarcan como algo difícil. Más allá de que hoy la tecnología permite estar en contacto a través del teléfono, mensajes, videollamadas, uno está solo. Resalta el papel que cumplen enfermeras y enfermeros en la asistencia de los pacientes con COVID. Quien más interactúa con uno es el personal de enfermería. Más que los médicos y el resto. El enfermero es el que más veces entra, el que más te ve, a quien le podés preguntar. Muchas veces se habla del equipo de salud y de los médicos, pero los enfermeros son los que más cerca y más tiempo están. Y por eso es tan importante la palabra de aliento, de contención, de tranquilidad, de los enfermeros. Se termina estableciendo una relación de contacto. Estuve ocho días, y ya reconocía a los que volvían en los mismos horarios. Supongo que para ellos debe ser una carga importante, porque entiendo que los pacientes les depositan a ellos su angustia. Preguntado sobre sus sentimientos frente al proceso de la enfermedad nos cuenta: Sentí miedo, temor. El hecho de ser médico y saber qué puede pasar, y los detalles de las radiografías, los análisis, el monitoreo, hacen que podamos estar sufriendo un poco más. Yo no estuve en terapia. No tuve un miedo exagerado pero sí un temor por no saber lo que iba a pasar. Eso a veces es difícil poder manejarlo. A veces se necesita de algún ansiolítico, poder descansar. Ante la pregunta sobre qué sentiste que perdías contesta con humor: El olfato perdí. Uno se siente muy vulnerable. La pérdida de la autonomía. No poder levantarte, no poder respirar, estar con suero durante tantos días. No poder manejarte independientemente. Que te ayudaran a bañarte. Ponerse en manos de otro, sentirse vulnerable y necesitar ayuda. En buen estado y ya reintegrado a sus tareas habituales conversamos sobre cuál era su actitud frente a la pandemia y si ésta cambió luego de semejante experiencia. El tiempo que transcurrió hasta ahora hace que uno vaya cambiando su forma de pensar y de ver qué pasa con todo esto, tanto acá como en el resto del mundo. Son diferentes realidades económicas. Uno cambia también. Desde la incredulidad, de creer que a nosotros no nos va a tocar, de sentirnos inmunes. Nos fuimos dando cuenta que los médicos también nos vamos a enfermar, es más, con mayor responsabilidad de riesgo. Como en toda situación límite, tanto para las personas como para la sociedad aparece lo bueno y lo malo, lo peor. Aparecen los ejemplos de solidaridad, de sacrificio, personal esencial que trabaja y se arriesga por el otro. También aparece mucho el egoísmo, el salvarse uno, pensar que uno se salva solo y que el resto se arregle. Eso también aparece. Es muy difícil salvarse solo. O se afrontan las situaciones todos juntos o pasa lo que pasa, esta extraña división en que algunos piensan que lo más importante es la salud y que hay que tomar las decisiones en función de eso y quienes piensan que lo importante es que la gente tenga trabajo y pueda entretenerse y divertirse y estrechar sus lazos sociales y familiares y que la salud pasa a segundo plano. No sé quién tiene la respuesta, no creo que nadie la tenga, sucede en todos lados, más en países como el nuestro, en que desde el punto de vista económico somos los más perjudicados. Yo no tengo una respuesta. Son posiciones muy irreductibles y eso tampoco está bueno. Lo bueno estaría en abrir un poco la cabeza y contemplar todos los aspectos. Creo que es difícil y quienes tienen que tomar decisiones están en ese brete. Preguntado sobre si ve diferencias en los medios público y privado de atención médica dice: Yo trabajé en un hospital, en medio de la pandemia pasé a otro tipo de institución, y estuve internado en un sanatorio privado. Entiendo que no hay diferencia en cuanto al éxito del tratamiento en un lugar o en otro. Esta enfermedad se trata de una manera sencilla. Los estudios diagnósticos son sencillos, los tratamientos también. Antibióticos, corticoides, oxígeno, respiradores. No se requiere de una tecnología que haga diferencia. Creo que la articulación entre lo público y lo privado nunca fue fácil, ahora tampoco. Sin embargo me parece que primó cierta responsabilidad en ambos sectores, público y privado, y de alguna manera se fueron absorbiendo los costos de la mejor manera. Le preguntamos cómo ve la actitud del estado frente a la pandemia: Creo que los estados deben tener humildad. Me molesta mucho la soberbia, cuando se utiliza esto políticamente. Cuando te va bien somos los mejores del mundo, bien argentino, y ahora que estamos complicados somos los peores. Creo que los estados deben ser responsables y que no se utilice esto ni de un lado ni del otro. Es difícil comparar países tan distintos en su desarrollo, en su economía, en sus cuestiones culturales. Imposible comparar China con Francia, con Suecia o Argentina. Cada país tiene realidades tan diferentes que a veces lo que se hace en un lugar no sirve para el otro. Así estamos. Creo que la gente está muy cansada, no hay un horizonte en cuanto a cuándo esto puede terminar y lo que no se sabe cuándo termina ni cómo genera incertidumbre y angustia. Si supiéramos que esto dura hasta el 22 de abril y ese día hacemos una gran fiesta y cada uno hace lo que quiere sería mucho más fácil de sobrellevar. Hoy no se sabe si termina en diciembre, en marzo, en junio, y eso genera angustia en la gente, más allá de los problemas económicos que pueda tener cada uno, me refiero a esta forma de vivir, de convivir con la pandemia. Ahora mucha gente siente malestar y cada uno tiene sus métodos y su herramienta para adaptarse a determinada situación. Hay que gente que le cuesta más y otros a los que les cuesta menos. En un principio parecía hasta simpático, todos cocinaban, hacían gimnasia delante del televisor, reuniones de zoom, encuentros virtuales. Con el tiempo eso se fue perdiendo y hay bastante cansancio. Desde su mirada de psiquiatra cómo ve repercutir la pandemia en la salud mental de las personas: Creo que como toda situación médica, o que genera estados tensionales, una situación inédita, agudiza lo preexistente, que a veces es manifiesto y a veces no. Aquellas personas que podían tener una conducta obsesiva, temerosa, o con ciertos rasgos de cuidado sobre su salud, ahora se agudiza. Así como también quien no respeta las normativas, o ejerce conducta de tipo sociopática, rebelde, o de no atenerse a lo que la sociedad estipula también se agudiza y rompe esas normas. Este es un campo propicio para romperlas más aún. También en personas que no tenían este tipo de problemática pueden aparecer síntomas relacionados con esto. Recordaba el libro de Saramago Ensayo sobre la ceguera y el de Camus La peste, creo que reflejan las conductas de las personas en situaciones como esta. Pienso que algunas personas pueden cambiar conductas en cuanto a cuidados, responsabilidades, solidaridad. Sin creer que a partir de ahora vamos a ser diferentes como personas o como sociedad, no creo eso. Cuando todo esto pase vamos a volver a ser como éramos pero a algunas personas puede ocurrirle elaborar algunas ideas para tener una nueva actitud. Yo asocio esto con la ecología, con el cuidado del medio ambiente, sobre todo en los jóvenes. Nos preguntamos en qué mundo estamos viviendo, y cómo nos hacemos cargo del medio ambiente y del mundo. Pensar en una alimentación más saludable, hábitos más saludables. También puede dejar muchas secuelas sobre todo quienes han perdido a un ser querido, un familiar, pueden verse afectados. Acostumbrados a pensar sobre la salud de los otros, es duro para los profesionales de la salud sentir en persona el padecimiento que la enfermedad genera. Ojalá esto pueda contribuir a producir en la medicina una mirada más humanitaria, deteriorada en las décadas pasadas en función de las tecnologías y el poco tiempo disponible para la relación médico-paciente. Agradecemos la generosa contribución del Dr Ariel Mazza, resaltamos la labor de tantos médicos y enfermeros y resto del personal esencial que trabajan a destajo para atender y ayudar a una enorme cantidad de enfermos. Dedicamos este artículo a quienes debieron sufrir una pérdida familiar por Covid 19, y recordamos en particular al Dr Carlos Trillini, colega de Armstrong que perdió la vida trabajando en la pandemia. Dr Raúl Feroglio Médico en Las Parejas Santa Fe- Argentina

SAN LUCAS Grupo Médico 03.05.2021

San Lucas Grupo Médico informa con pesar el fallecimiento del Dr Carlos Trillini, de Armstrong. Compañero de muchos años de tareas compartidas. Por dicho motivo nuestra institución estará cerrada en señal de luto hasta el 16/10 a mediodía

SAN LUCAS Grupo Médico 16.04.2021

Feliz día del psicólogo. Sabrina Rosso, Guillermina Lapetina. Y a todos y todas.Feliz día del psicólogo. Sabrina Rosso, Guillermina Lapetina. Y a todos y todas.

SAN LUCAS Grupo Médico 10.04.2021

DESPERDICIÉ LOS MEJORES AÑOS DE MI JUVENTUD En esta nota revelamos, por supuesto que en forma anónima, las experiencias de un varón de 38 años, actualmente re...cuperado de su adicción al juego (ludopatía). Nuestro entrevistado reconoce que desde pequeño, entre los ocho y los diez años, participaba de reuniones familiares con tías abuelas que tres o cuatro veces por semana se reunían a jugar al chinchón, y que ahí descubrió el placer de obtener una ganancia jugábamos por monedas, pero esas monedas me servían para ir al kiosko La psicología reconoce una diferencia entre el juego por entretenimiento, el juego profesional y el juego patológico. Nuestro paciente refiere cómo comenzó su experiencia complicada con el juego: Empecé a jugar a los 20. Iba a los casinos, de vez en cuando. Y fue progresivo. Año a año iba anexando: juego clandestino, dados, partidas en casas o en bares. Eso es ilegal. Al segundo año me di cuenta porque empezó a traerme problemas económicos, y no lo podía controlar, seguía jugando. Preguntado sobre cuáles juegos prefería nos cuenta que apostaba a casi todo: ruleta, dados, cartas (poker, black jack), quiniela, apuestas deportivas. Fueron años complicados. A lo que había para jugar jugaba. Era esa adrenalina de sentir que apostaba plata que podía perder o ganar. Siente que desperdició sus mejores años, de los veinte a los treinta y seis, y habla del tema con arrepentimiento: de los siete días de la semana, salía cinco, de las 9 de la noche a las 7 de la mañana. Eso fue tres o cuatro años de mi vida, que fueron bastante complicados. Los otros dos días los guardaba para compartir con mi novia o mi familia. Hay horas en que estás jugando, y las otras horas tratando de buscar plata, dibujar las deudas. Los especialistas refieren la Ludopatía como una patología en que la compulsión a jugar pasa a ser el motivo más importante en la vida del jugador, y no se diferencia de lo que sucede con el consumo de drogas, legales, como el tabaco o el alcohol, o ilegales. El cerebro espera una nueva dosis, en este caso la descarga, la excitación que despierta volver a enfrentarse a la circunstancia de la apuesta. Nuestro paciente lo describe con claridad: Al jugar sentía que se bloqueaba la mente, y cuando estaba jugando no recordaba nada de mi vida cotidiana ni de lo que tenía que hacer al otro día. Entraba en un éxtasis, no me acordaba de nada. Refiere que hay muchas mujeres que juegan a máquinas tragamonedas en los casinos, pero que en el resto del juego, tanto ruleta como en juego clandestino, la gran mayoría son hombres. Y cuenta anécdotas de otras personas que conoció y que estaban en su misma circunstancia: me terminé dando cuenta de que en medio de esa vorágine, si me pasaba algo feo en mi vida me iba a jugar y esas 4 o 5 horas que estaba ahí adentro no me acordaba nada de todo lo que había afuera. Vi gente ahí a quienes los llamaban por teléfono, sus familiares, y no atendían. En Rosario conocí un cirujano que tenía una cirugía programada para hacer y lo llamaban y no fue, se quedó jugando. Muchas historias. Gente que se jugaba la plata del alquiler, o lo que habían ahorrado con la mujer para el cumpleaños de 15 de la hija. El juego te lleva a lugares muy oscuros. Nos cuenta de la excitación que le provocaba entrar al casino, y que si no jugaba la sensación de abstinencia no era solo de tipo psicológica sino que la sentía en el cuerpo Recuerda volver del casino, cien kilómetros, llorando, con rabia, con muchísima culpa y angustia, y sin embargo al otro día volvía a jugar. Hace dos años que no juega, y dice que está mucho más tranquilo aunque siempre con una pequeña preocupación por no recaer, porque sabe que como en todas las adicciones, deberá estar atento toda su vida. Y que gracias al psicoanálisis, que comenzó hace varios años, y al volcarse más a pasar tiempo con familia y amigos, y al apoyo de su novia, también psicóloga, logró esta situación de estabilidad. A través de la terapia pudo concluir que el juego era una forma de escape para borrar la realidad. El sentimiento que predomina en toda la entrevista es la culpa, el arrepentimiento, y accede gustoso y colaborador, pensando que pueda servir de ayuda a otras personas que vivan la misma situación que hizo que perdiera tal vez los mejores años de su vida en sitios oscuros (aunque paradójicamente llenos de luces), rodeado de desconocidos, dejando de lado familia y amigos. Agradecemos la valentía de contar con sinceridad su dolorosa historia. See more

SAN LUCAS Grupo Médico 05.04.2021

DESPERDICIÉ LOS MEJORES AÑOS DE MI JUVENTUD En esta nota revelamos, por supuesto que en forma anónima, las experiencias de un varón de 38 años, actualmente re...cuperado de su adicción al juego (ludopatía). Nuestro entrevistado reconoce que desde pequeño, entre los ocho y los diez años, participaba de reuniones familiares con tías abuelas que tres o cuatro veces por semana se reunían a jugar al chinchón, y que ahí descubrió el placer de obtener una ganancia jugábamos por monedas, pero esas monedas me servían para ir al kiosko La psicología reconoce una diferencia entre el juego por entretenimiento, el juego profesional y el juego patológico. Nuestro paciente refiere cómo comenzó su experiencia complicada con el juego: Empecé a jugar a los 20. Iba a los casinos, de vez en cuando. Y fue progresivo. Año a año iba anexando: juego clandestino, dados, partidas en casas o en bares. Eso es ilegal. Al segundo año me di cuenta porque empezó a traerme problemas económicos, y no lo podía controlar, seguía jugando. Preguntado sobre cuáles juegos prefería nos cuenta que apostaba a casi todo: ruleta, dados, cartas (poker, black jack), quiniela, apuestas deportivas. Fueron años complicados. A lo que había para jugar jugaba. Era esa adrenalina de sentir que apostaba plata que podía perder o ganar. Siente que desperdició sus mejores años, de los veinte a los treinta y seis, y habla del tema con arrepentimiento: de los siete días de la semana, salía cinco, de las 9 de la noche a las 7 de la mañana. Eso fue tres o cuatro años de mi vida, que fueron bastante complicados. Los otros dos días los guardaba para compartir con mi novia o mi familia. Hay horas en que estás jugando, y las otras horas tratando de buscar plata, dibujar las deudas. Los especialistas refieren la Ludopatía como una patología en que la compulsión a jugar pasa a ser el motivo más importante en la vida del jugador, y no se diferencia de lo que sucede con el consumo de drogas, legales, como el tabaco o el alcohol, o ilegales. El cerebro espera una nueva dosis, en este caso la descarga, la excitación que despierta volver a enfrentarse a la circunstancia de la apuesta. Nuestro paciente lo describe con claridad: Al jugar sentía que se bloqueaba la mente, y cuando estaba jugando no recordaba nada de mi vida cotidiana ni de lo que tenía que hacer al otro día. Entraba en un éxtasis, no me acordaba de nada. Refiere que hay muchas mujeres que juegan a máquinas tragamonedas en los casinos, pero que en el resto del juego, tanto ruleta como en juego clandestino, la gran mayoría son hombres. Y cuenta anécdotas de otras personas que conoció y que estaban en su misma circunstancia: me terminé dando cuenta de que en medio de esa vorágine, si me pasaba algo feo en mi vida me iba a jugar y esas 4 o 5 horas que estaba ahí adentro no me acordaba nada de todo lo que había afuera. Vi gente ahí a quienes los llamaban por teléfono, sus familiares, y no atendían. En Rosario conocí un cirujano que tenía una cirugía programada para hacer y lo llamaban y no fue, se quedó jugando. Muchas historias. Gente que se jugaba la plata del alquiler, o lo que habían ahorrado con la mujer para el cumpleaños de 15 de la hija. El juego te lleva a lugares muy oscuros. Nos cuenta de la excitación que le provocaba entrar al casino, y que si no jugaba la sensación de abstinencia no era solo de tipo psicológica sino que la sentía en el cuerpo Recuerda volver del casino, cien kilómetros, llorando, con rabia, con muchísima culpa y angustia, y sin embargo al otro día volvía a jugar. Hace dos años que no juega, y dice que está mucho más tranquilo aunque siempre con una pequeña preocupación por no recaer, porque sabe que como en todas las adicciones, deberá estar atento toda su vida. Y que gracias al psicoanálisis, que comenzó hace varios años, y al volcarse más a pasar tiempo con familia y amigos, y al apoyo de su novia, también psicóloga, logró esta situación de estabilidad. A través de la terapia pudo concluir que el juego era una forma de escape para borrar la realidad. El sentimiento que predomina en toda la entrevista es la culpa, el arrepentimiento, y accede gustoso y colaborador, pensando que pueda servir de ayuda a otras personas que vivan la misma situación que hizo que perdiera tal vez los mejores años de su vida en sitios oscuros (aunque paradójicamente llenos de luces), rodeado de desconocidos, dejando de lado familia y amigos. Agradecemos la valentía de contar con sinceridad su dolorosa historia. See more

SAN LUCAS Grupo Médico 14.03.2021

Dr. Roberto Venesia Reserva de turnos Martes 15/8 470544 / 489194 Horario Corrido de 8 a 20 hs. ... Realizamos diagnóstico y tratamos las heridas crónica, causadas por la mala circulación venosa, la diabetes y otras afecciones. Después de una evaluación exhaustiva, nuestro equipo desarrolla un plan de atención adaptado a las necesidades de cada paciente. Contamos con los más modernos equipos y realizamos los tratamientos más avanzados y efectivos en la cura de heridas.

SAN LUCAS Grupo Médico 11.03.2021

Dr. Roberto Venesia Reserva de turnos Martes 15/8 470544 / 489194 Horario Corrido de 8 a 20 hs. ... Realizamos diagnóstico y tratamos las heridas crónica, causadas por la mala circulación venosa, la diabetes y otras afecciones. Después de una evaluación exhaustiva, nuestro equipo desarrolla un plan de atención adaptado a las necesidades de cada paciente. Contamos con los más modernos equipos y realizamos los tratamientos más avanzados y efectivos en la cura de heridas.

SAN LUCAS Grupo Médico 27.02.2021

Bienvenido Dr. Luciano Pellegrini Cirujano Plástico Proximo viernes 14/8 Solicite turnos ... 470544 / 489194 Cirugía Plástica Estética y Reparadora: Implantes mamarios. Abdominoplastia. Lipoaspiración. Rejuvenecimiento facial. Rinoplastia. Medicina Estética: Ac Hialuronico. Toxina botulínica. PRP. Radiofrecuencia Fraccionada (Frax Face).

SAN LUCAS Grupo Médico 25.02.2021

Bienvenido Dr. Luciano Pellegrini Cirujano Plástico Proximo viernes 14/8 Solicite turnos ... 470544 / 489194 Cirugía Plástica Estética y Reparadora: Implantes mamarios. Abdominoplastia. Lipoaspiración. Rejuvenecimiento facial. Rinoplastia. Medicina Estética: Ac Hialuronico. Toxina botulínica. PRP. Radiofrecuencia Fraccionada (Frax Face).

SAN LUCAS Grupo Médico 02.10.2020

Dr. Roberto Venesia Reserva de turnos Martes 15/8 470544 / 489194 Horario Corrido de 8 a 20 hs. ... Realizamos diagnóstico y tratamos las heridas crónica, causadas por la mala circulación venosa, la diabetes y otras afecciones. Después de una evaluación exhaustiva, nuestro equipo desarrolla un plan de atención adaptado a las necesidades de cada paciente. Contamos con los más modernos equipos y realizamos los tratamientos más avanzados y efectivos en la cura de heridas.

SAN LUCAS Grupo Médico 24.09.2020

Bienvenido Dr. Luciano Pellegrini Cirujano Plástico Proximo viernes 14/8 Solicite turnos ... 470544 / 489194 Cirugía Plástica Estética y Reparadora: Implantes mamarios. Abdominoplastia. Lipoaspiración. Rejuvenecimiento facial. Rinoplastia. Medicina Estética: Ac Hialuronico. Toxina botulínica. PRP. Radiofrecuencia Fraccionada (Frax Face).

SAN LUCAS Grupo Médico 29.08.2020

Día Mundial sin tabaco El tabaquismo es un factor de riesgo para enfermedades respiratorias o cardiovasculares como hipertensión, diabetes, EPOC o asma, que i...mplican un mayor riesgo de sufrir complicaciones por COVID-19. + info: https://www.argentina.gob.ar/salud/glosario/tabaquismo #CuidarteEsCuidarnos #ArgentinaUnida

SAN LUCAS Grupo Médico 12.08.2020

Sábado 23/5 comunicate 470544

Información

Localidad: Las Parejas

Teléfono: +54 3471 56-7625

Ubicación: Calle 20 Nro 766 2505 Las Parejas, Santa Fe, Argentina

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